InWin ha lanzado oficialmente su chasis Signature de 11ª generación en edición limitada, Infinite. Presentado por primera vez a principios del presente año en la Computex de Taipei, este esperado lanzamiento ya está a disposición del público.
Infinite redefine el diseño de los chasis de PC con un notable salto artístico, mostrando el mayor cristal curvado 180 grados jamás integrado en un chasis de PC. Lograr la curva envolvente perfecta fue una notable proeza de ingeniería y artesanía técnica, que requirió retorcer el cristal en direcciones opuestas.
Se empleó una meticulosa atención al detalle y técnicas de nuevo desarrollo para dar forma a cada lámina sobre su molde personalizado. Con un grosor de 6 mm, el vidrio se sometió a un proceso de refuerzo químico, complementado con una capa de película protectora para evitar roturas y aumentar la seguridad.
La carcasa de aluminio para el hardware del PC presenta un contrapliegue que refleja la envoltura de cristal en la dirección opuesta para garantizar una alineación precisa con el borde del cuerpo principal, completando el chasis.
El aluminio anodizado de 4 mm de grosor presenta un borde cortado con diamante y un acabado arenado, mientras que los detalles como la E/S frontal están realzados con un cepillado fino e iconos grabados con láser.
El cuerpo está unido a una base de aluminio forjado a mano mediante una bisagra motorizada, completada con un logotipo cortado con diamante. El soporte está fundido en arena en una sola pieza para conseguir resistencia en su forma única.
Un panel lateral magnético en la parte posterior permite acceder fácilmente a los cables ubicados detrás de la zona de la placa base. El chasis también ofrece espacio suficiente para las últimas placas base con conectores orientados hacia atrás, lo que garantiza un montaje más limpio con menos cables visibles.
En lugar de retirar el cristal, como es habitual en la mayoría de los chasis de PC, basta con pulsar un botón para que Infinite gire todo el chasis de aluminio y permita acceder al hardware interno. La estructura mecanizada gira suavemente el chasis alrededor de su bisagra circular, pasando de vertical a horizontal y moviendo hasta 25 kilogramos de hardware, suficiente incluso para los PC de gama más alta.
Cada Infinite cumple las normas de calidad más estrictas, y la bisagra motorizada se ha sometido a pruebas rigurosas para garantizar un funcionamiento fiable durante más de 1.500 movimientos.
Una combinación de tres grandes ventiladores de entrada y un diseño de marco semiabierto garantiza un excelente potencial de refrigeración y personalización, al tiempo que proporciona una visión completa de los componentes internos para mostrar los equipos de PC de primera calidad.
La iluminación integrada en los bordes mejora la experiencia visual a través del cristal curvado y ofrece más de una docena de modos de iluminación personalizables con solo pulsar un botón, lo que convierte a Infinite en una atractiva pieza central en cualquier habitación.
La serie Signature de InWin siempre ofrece diseños únicos, y el Infinite es su chasis más ambicioso hasta la fecha. Cada chasis lleva grabado un número de serie individual, lo que pone de relieve su rareza y exclusividad.
Vía: InWin
