Quick, Draw! – o el Pictionary de Google
Tal vez recordeis cuando, en 2016, Google lanzó un experimento de Inteligencia Artificial: un detector de garabatos que intentaba identificar lo que dibujaban los usuarios. Es similar al juego Pictionary, donde un jugador (el usuario) hace un garabato, y otro jugador (el software con IA) intenta adivinar qué representa el dibujo.
Desde luego, es muy interesante interactuar con la web de Quick, Draw!. Os recomendamos 3 cosas:
- Dibujar el garabato que solicita la web.
- Dibujar otro garabato y ver cómo el software realiza varios intentos de adivinar qué es.
- Explorar la galería de dibujos que hicieron otros usuarios. Si pensabas que dibujas mal… ¡échale un ojo a algunos dibujos! Por ejemplo: un pájaro
¿Y si se dibuja un pene?
Pues bien, hay un garabato fácilmente identificable que la IA de Google no identifica: un pene.
Puede parecer infantil, pero en realidad es una gran exclusión. Guste o no, el garabato del pene es uno de los más reproducidos a lo largo de toda la historia de la humanidad: desde muros del Imperio Romano hasta manuscritos de la Edad Media.
Dibujo en un manuscrito de la Edad Media.
Para remendar el error de Google, la fundación Mozilla encargó a los diseñadores holandeses de Moniker desarrollar un detector de penes con inteligencia artificial. Puede parecernos divertido o incluso «humor tonto», es cierto, pero desde Mozilla y Moniker aclaran que detrás de esto se esconde una cuestión seria: en una época en que los gigantes tecnológicos de EEUU controlan tanta cantidad de lo que vemos online, ¿deberían preocuparnos los estándares morales que establecen?
La web: Do not draw a penis (no dibujes un pene)
Esta es la web (donotdrawapenis.com) donde puedes poner a prueba el detector de penes, que como véis es una parodia a la web de Google que os hemos enlazado anteriormente.
Cuando dibujas un pene, la voz dirá (en inglés) cosas como «Vamos a asumir que has hecho un error», o «¡No lleves tan lejos la expresión individual!», y borrará el boceto. Si seguimos dibujando penes, el software se enfadará cada vez más con nosotros y acabará enloqueciendo y dibujando sus propios bocetos.
Roel Wouters, de Moniker, declara que puede parecer una tontería, pero el hecho de que la IA de Google no pueda (deliberadamente) reconocer esta figura no es tan trivial como podría parecer, y destaca otros ejemplos similares. El más conocido: la prohibición de Instagram y Facebook de mostrar pezones de mujeres (pero no de hombres), imponiendo así en usuarios de todo el mundo el pudor de, en este caso, la cultura estadounidense.
«La cuestión aquí es que nuestra escala de valores no debería estar en manos de los gigantes tecnológicos», dice Wouters. Personalmente, afirma, le encanta el proyecto de Google (Quick, Draw!), pero señala que cuanto más usen las empresas a la inteligencia artificial para moderar plataformas online, más aumenta el riesgo de censura.
«Este proyecto no trata de la libertad de expresión», sigue Wouters, «es solo un recordatorio sobre los indeseados poderes de las grandes empresas tecnológicas, y sus tendencias paternalistas». Y añade: «Para nosotros, dibujar un pene es un divertido gesto simbólico de un acto de rebeldía».
Y eso ha sido así desde hace miles de años — tanto si la inteligencia artificial de las grandes empresas lo reconoce, como si no.
Vía: TheVerge
