El pasado mes de enero, Microsoft propuso la compra de Activision Blizzard en una operación de 68.700 millones de dólares, pero el acuerdo sigue encontrándose diversos obstáculos y aún no se ha podido concretar. El último escollo lo ha puesto la UE, ya que no está convencida de que dicha adquisición vaya a beneficiar al mercado.
Según fuentes familiarizadas con el caso, la Comisión Europea tiene serias dudas al respecto y está elaborando un comunicado de objeciones sobre dicho acuerdo. La comisión ha fijado el 11 de abril como fecha límite para su resolución definitiva sobre la operación.
A continuación exponemos lo que ha comentado Microsoft al respecto:
Seguimos trabajando junto con la Comisión Europea para resolver las posibles objeciones relacionadas con la situación del mercado. Nuestro objetivo es llevar cada vez más juegos a un mayor número de personas, y gracias a dicho acuerdo lo conseguiremos.
Ciertos rumores parecen indicar que Microsoft y el organismo antimonopolio de la UE están manteniendo conversaciones extraoficiales sobre la operación y que Microsoft está tratando de ofrecer ciertas garantías a fin de acelerar el proceso de adquisición, pero la Comisión Europea insiste en remitir primero su correspondiente comunicado de objeciones.
Asimismo, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos recurrirá a los tribunales para bloquear la operación, los organismos reguladores del Reino Unido han expresado su preocupación y la propia Sony también alberga cierto recelo ante dicho acuerdo.
La compañía japonesa teme que la franquicia Call of Duty, entre otros títulos, pasen a ser exclusivos de Xbox y los usuarios de PlayStation dejen de tener acceso a los mismos.
Vía: GSMArena