
Si tienes un portátil ASUS ROG de generaciones recientes y notas microcortes en vídeos, ratón que se congela o llamadas entrecortadas, no estás solo. Un informe técnico revela que el origen del fallo no está en los drivers ni en Windows, sino en la implementación defectuosa del estándar ACPI dentro del BIOS.
Stuttering ligado a la gestión de interrupciones
El investigador Zephkek descubrió con LatencyMon que el primer núcleo de la CPU en equipos como el Zephyrus M16 queda bloqueado gestionando interrupciones durante hasta 90 segundos. Al estar saturado, cualquier proceso que dependa de ese núcleo se ve afectado: desde un vídeo en YouTube hasta una llamada en Discord.
El origen estaría en el código ACPI, encargado de los estados de energía y configuración de dispositivos. En lugar de optimizar, el firmware de ASUS provoca bloqueos recurrentes que degradan la experiencia de uso.
Ciclos de GPU ilógicos e inestabilidad
El problema se agrava con la gestión gráfica. Muchos ROG integran GPU integrada y GPU dedicada con conmutador MUX. Al conectar un monitor externo, debería mantenerse la dGPU activa permanentemente. Sin embargo, la BIOS la enciende y apaga cada 15-30 segundos, aunque ya esté en uso, lo que añade inestabilidad y microcortes en juegos y tareas intensivas.
Soluciones parciales y falta de respuesta oficial
Algunos usuarios reportan mejoras tras actualizaciones de BIOS en modelos concretos, como el Zephyrus G14 de 2022. En cambio, equipos como el G15 de 2021 siguen experimentando stuttering, especialmente tras salir del modo suspensión. Esto apunta a que ASUS podría haber parcheado discretamente ciertos modelos, mientras otros permanecen afectados.
De momento, la compañía no ha hecho declaraciones oficiales ni confirmado si habrá una solución global. Así, los problemas persisten en modelos Zephyrus, Strix y Scar de 2021 a 2024, dejando a gamers y usuarios avanzados con un lastre difícil de mitigar.
Vía: Guru3D