
Después de casi cuatro décadas, la icónica «Blue Screen of Death» (BSOD) dejará paso a un diseño renovado que busca facilitar la detección de errores del sistema. Microsoft ha confirmado que, a partir del verano de 2025, todos los usuarios de Windows 11 verán una pantalla negra cuando se produzcan fallos graves en el sistema, con un enfoque mucho más funcional.
Un cambio visual que prioriza la claridad
La nueva pantalla de error tendrá fondo negro, prescindiendo del tradicional emoticono triste y del código QR. En su lugar, aparecerá un único código de parada (stop code) en la parte inferior, indicando el controlador o componente exacto que ha provocado el fallo.
Este diseño minimalista ya había aparecido en versiones Insider de Windows y recuerda a las pantallas de progreso que se ven durante las actualizaciones del sistema. Según Microsoft, eliminar elementos visuales innecesarios ayuda a que tanto usuarios como técnicos puedan identificar el origen del problema de forma más rápida, sin necesidad de volcar archivos de errores ni usar herramientas de depuración avanzadas.
Disponible con Windows 11 a partir del verano
La nueva pantalla negra de error se desplegará globalmente en Windows 11 a finales del verano de 2025, acompañada por una herramienta clave: Quick Machine Recovery. Esta función permitirá recuperar sistemas que no arrancan tras un fallo grave, acortando los tiempos de reparación.
David Weston, vicepresidente de seguridad empresarial y del sistema operativo en Microsoft, explica que la decisión surge tras incidentes como el fallo masivo causado por una actualización de CrowdStrike en 2024, que provocó bloqueos en miles de dispositivos. Según Weston, el objetivo ahora es ofrecer información clara, concisa y útil para saber si el problema está en Windows o en un componente externo.
Microsoft pone fin a una era con la Black Screen of Death
Aunque la pantalla negra ya se probó hace años, las críticas obligaron a volver temporalmente al azul. Esta vez, la propuesta llega con un enfoque renovado y herramientas complementarias que buscan facilitar la vida a millones de usuarios.
Así, la Blue Screen of Death se despide oficialmente, dando paso a su sucesora: la Black Screen of Death, más sobria, precisa y alineada con las nuevas necesidades del ecosistema Windows.
Vía: TechPowerUp