Hoy os traemos un juego que como algunos ya sabréis bebe y mucho de otros grandes títulos del género como son Resident Evil y Silent Hill. Antes de nada, dejar claro que cuando algo funciona, copiarlo (hasta cierto punto) no está mal. Y es que si una mecánica o un tipo de desarrollo funciona, ¿Por qué no utilizarlo? Así que vamos a contaros que nos ha parecido en este análisis de Daymare 1994 Sandcastle. Prepárate para volver a los 90.
Este es el caso de Daymare 1994 Sandcastle, desarrollado por Invader Studios y que toma a Resident Evil como juego en el que reflejarse. Y no es que yo lo diga, es que todo lo que vemos en pantalla recuerda constantemente a esta saga. A los que no conozcan Daymare 1998, sepan que Daymare 1994 Sandcastle es la segunda entrega de este proyecto que comenzó como un remake realizado por fans y que acabó convirtiéndose en un título completamente nuevo.
Análisis de Daymare 1994 Sandcastle.
Una historia anterior, pero con la misma esencia
Daymare 1994 Sandcastle se trata de la precuela de Daymare 1998. En esta ocasión tomaremos el control de la agente Dalila Reyes, que forma parte del escuadrón HADES. Nuestra misión es adentrarnos en una de las localizaciones más conocidas (y secretas) del mundo. Pero no será ni fácil ni rápido y es que al parecer hay algo ahí dentro que está esperando a que entremos.
Nos embarcaremos en esta aventura junto al resto de nuestro equipo y como os podéis imaginar, todo acaba torciéndose pronto y tendremos que abrirnos camino a través de todo tipo de instalaciones y laboratorios para lograr salir con vida. Con una historia y una narrativa que enganchan veremos cómo las cosas no son tan sencillas como la agente Reyes cree.
Un estilo noventero pero adaptado a los nuevos tiempos
Daymare 1994 Sandcastle nos transporta al estilo de los survival horror de los 90. Obviamente, hablar de survival de los 90 nos lleva automáticamente a pensar en Resident Evil, pero es que, como ya hemos dicho antes, todo en este título te lleva a compararlo con la saga. No obstante, hay que decir que sale muy bien parado en esta comparativa. Su estilo, en tercera persona y cámara libre, mezcla el terror de siempre con los controles de hoy en día.
Con las mecánicas más típicas, puzles y algún que otro susto, Daymare logra aunar los elementos típicos de los survival. Además, añade alguna de cosecha propia que no se siente fuera de sitio, al contrario, estas nuevas mecánicas hace que se sienta lo necesariamente diferente como para no estar ante una copia. De igual forma, aquí no estamos ante zombis típicos, estamos ante cadáveres que se levantan, pero por motivos totalmente diferentes.
Armas y herramientas para hacer frente al peligro
En esta nueva entrega tendremos muchos más enemigos, más rápidos, letales y aterradores que en el título anterior. Obviamente, no iremos con un cartel de “regalo abrazos”. Tendremos a nuestra disposición un par de armas de fuego y un equipo de nitrógeno que nos ofrecerá un buen puñado de posibilidades para enfrentarnos a lo que sea que tengamos delante.
Además, el sistema de nitrógeno no es algo que debamos pasar por alto ni mucho menos. Gracias a este sistema podremos ahorrar una gran cantidad de munición, además de no llevarnos unos cuantos mordiscos imprevistos. Las armas de fuego tienen la función típica de acabar con los enemigos, aunque no a todos los enemigos les afecta de la misma forma.
Nuestros enemigos son cadáveres que se han visto reanimados por una especie de energía electroestática que los devuelve a la vida al entrar en ellos. Esta energía se presenta en un par de colores, azul y rojo. Si bien en el caso de la energía azul tan solo necesitaremos derribarlos a base de disparos, la energía roja necesitará del uso del equipo de nitrógeno para congelar a los enemigos y después volar por los aires su cabeza de una vez por todas.
Es por esto que hacía hincapié en la necesidad de tener presente el equipo de nitrógeno, ya que puede sacarnos de muchas situaciones complicadas de forma efectiva. Además, hay que tener en cuenta, que según avanzamos en la aventura, este equipo puede mejorarse con nuevas habilidades, más potencia o un gasto menor del combustible.
Un estilo visual que consigue tenernos en ascuas
En Daymare 1994 Sandcastle llevan el apartado visual a un punto bastante bueno, sobre todo en lo que a sombras y luces se refiere. Durante toda la aventura, la iluminación es algo que se nota muy controlado, y en el que la linterna será clave si queremos saber por dónde vamos. El acabado general del juego consigue escenarios muy bien trabajados y que muestran que algo no anda bien.
Si le tenemos que poner algún pero a Daymare 1994 Sandcastle es en las animaciones faciales. Se notan exageradas en muchos casos e inexistentes en otras, pero es perdonable en el cómputo general del juego. Hablando del sonido que acompaña a Daymare 1994 Sandcastle estamos ante uno de los puntos mejor trabajados del juego. Una BSO digna de la historia que estamos viviendo y unos efectos de sonido muy acertados hacen que todo lo que vemos, quede engrandecido con el audio del juego.
Análisis de Daymare 1994 Sandcastle: Conclusión
Daymare 1994 Sandcastle nos trae un survival horror de los clásicos, pero muy bien adaptado a los tiempos que corren. Con unos controles sencillos, una historia que tiene todo lo necesario para engancharnos y unos gráficos bastante bien trabajados. El sonido cumple con creces y su jugabilidad es muy sencilla y directa. Daymare 1994 Sandcastle se erige como un indispensable para los fans del género.
Agradecemos a Leonardo Interactive la confianza depositada en nosotros al cedernos Daymare 1994 Sandcastle
Fanáticos del Hardware otorga la medalla de ORO a Daymare 1994 Sandcastle
Esperamos que os haya gustado, suscribiros a nuestros canales tanto de Youtube como Twitch y seguidnos en nuestras RRSS como Twitter, Facebook e Instagram para estar al tanto de todas las novedades relacionadas con Videojuegos, Hardware y Tecnología.
