NP: 5 puntos clave para elegir el mejor monitor para profesionales del arte digital

Hemos recibido una nota de prensa por parte de MMD, os la dejamos a continuación:

5 puntos clave para elegir el mejor monitor para profesionales del arte digital

Características como el color, el tamaño del monitor, la resolución, la tecnología del panel o el formato son cruciales para los profesionales que quieren adquirir un monitor.

Con una gran cantidad de tamaños de monitor, resoluciones, relaciones de aspecto, tecnologías de panel y soporte de color que compiten por el espacio en las tiendas, incluso los usuarios profesionales pueden tener dificultades para elegir la pantalla adecuada para que sus fotos y diseños destaquen. Por esto, MMD, socio con licencia de marca para fabricación de monitores Philips, señala estos puntos clave:

1. En primer lugar, una cuestión crucial: el color. En un entorno profesional, los colores de la pantalla deben ser lo más parecido posible a los de salida de otros dispositivos (como impresoras). Esta es la razón por la que una representación de color precisa es tan importante. A pesar de que puede parecer mucho, los 16,7 millones de colores que normalmente se pueden reproducir en una pantalla estándar no son suficientes para gráficos profesionales y aplicaciones de fotos. Un buen monitor para este tipo de trabajo necesita tanto una amplia gama de colores como una excelente calibración. Estos son algunos de los términos que necesitas saber:

   1. El espacio de color sRGB es el mínimo;

   2. Adobe RGB es una gama más amplia que sRGB y es el estándar dentro de la industria. Una pantalla profesional debe ser capaz de reproducir exactamente al menos el 90% de los colores (preferiblemente más) en este espacio;

   3. Otro estándar común de espacio de color es la gama NTSC – 72% NTSC = 99% sRGB. Por tanto, una pantalla que pueda reproducir más del estándar de 72% NTSC ofrecerá colores aún más nítidos y realistas. La mayoría de los nuevos monitores Philips, por ejemplo, están equipados con tecnologías que les permiten reproducir entre el 85% NTSC (122,9% sRGB) y el 104% NTSC (130% sRGB).

2. Otra cuestión a valorar es el tamaño del monitor y la relación de aspecto:

   1. Para una buena visión general del trabajo creativo, hacer comparaciones o para multitarea, lo ideal es una pantalla grande. Cualquier monitor con menos de 27» no cubrirá las necesidades de un fotógrafo o un diseñador. Por tanto, una pantalla de 32», e incluso una de 40», serían ideales, ya que ofrecen un espacio suficiente para desarrollar un trabajo de calidad. Podrás encontrar algunas sugerencias de estas pantallas aquí.

   2. La relación de aspecto también es importante. Las pantallas panorámicas son ahora un estándar y muchos diseñadores optan por 16:9, ya que además de ofrecer mucho espacio horizontal, también proporcionan un espacio relativo en altura, en comparación, por ejemplo, con un 21:9. Esto significa que se requiere menos movimientos de cuello y ojos para una buena visión general y puede adaptarse proporcionalmente a los tamaños de impresión estándar.

3. La elección de la resolución debe considerarse junto con el tamaño de la pantalla. ¿Full HD es suficiente? ¿O deberían los usuarios optar por Quad HD o incluso 4K? Una resolución QHD tiene 2560 x 1440 píxeles, en contraposición a los 1920×1080 del Full HD. Cuanto mayor sea la pantalla, sin embargo, mayor será la resolución. Dado que los fotógrafos profesionales y diseñadores estarán buscando en tamaños de pantalla de 27 pulgadas para arriba, tiene sentido que opten por resoluciones más altas, en QHD mínimo.

Pero si planeas ir incluso por una pantalla más grande, tendrás que considerar una 4K, una categoría que se está haciendo rápidamente muy popular. Estos monitores ofrecen una resolución aún mayor, 3840 x 2160, lo que los hace ideales para el zoom complejo en los detalles precisos. Con más píxeles empaquetados en cada pulgada cuadrada en la pantalla, los píxeles individuales permanecen imperceptibles incluso en niveles de zoom muy cercanos. Cualquiera que trabaje con pantallas divididas podría encontrar una pantalla de 40 pulgadas de gama alta con resolución 4K, que sería la opción correcta para sus trabajos.

1. Ahora, la tecnología del panel. Hay dos tecnologías comunes, que son ideales para trabajos gráficos: VA (alineación vertical) e IPS (conmutación en plano). Ambos ofrecen ángulos de visión similares, extra-amplios de 178 grados, lo que permite ver la pantalla desde casi cualquier ángulo. Hay una diferencia en la precisión del color y el brillo constante, que son ligeramente más altos en los paneles IPS. En muchos monitores nuevos con panel VA, sin embargo, esto está bien compensado a través de tecnologías especiales para mejorar el color, por ejemplo, con la tecnología Ultra Wide-Color en los modelos de Philips, lo que proporciona una precisión de color a un nivel excelente. Es más, los paneles VA muestran mejores negros y mejor contraste que los paneles IPS, y tienden a tener un menor consumo de energía.

2. ¿Plano o curvo? Esto ya depende de la preferencia personal. Las últimas pantallas curvas envuelven el espacio de la pantalla suavemente alrededor de la línea de visión del usuario, permitiendo un mayor enfoque en la tarea que se realiza: un punto importante a tener en cuenta en entornos de oficina ajetreados. Una pantalla curva es capaz de crear una mayor percepción de la profundidad con una distorsión de imagen mínima. Sin embargo, algunos usuarios se inclinan más por pantallas planas para el momento de crear (en lugar de ver) el contenido, ya que cualquier distorsión, incluso mínima, no es bienvenida. Dependiendo del espacio del escritorio (y del presupuesto), puede ser una gran idea tener una disposición de pantallas dual: teniendo una plana y una curva.

Los profesionales gráficos deben centrarse en estas características clave como primera opción, pero también deberán tener en cuenta otros elementos, tales como el ajuste ergonómico y una buena conectividad. Todos los aspectos juegan un papel fundamental a la hora de permitirles ser más productivos en su entorno laboral.