Qué tener en cuenta al comprar un monitor en Black Friday y Navidad, según Hannspree

Qué tener en cuenta al comprar un monitor en Black Friday y Navidad, según Hannspree

Con el Black Friday y la campaña navideña a la vuelta de la esquina, es el momento idóneo para comprar un monitor. Por ello, hay que tener en cuenta una serie de factores para escoger la opción más adecuada. Trabajar, estudiar o jugar a videojuegos son tareas que requieren especificaciones diferentes y conviene priorizarlas según las necesidades de cada usuario.

Desde Hannspree, fabricante mundial especializado en pantallas, monitores y tablets, destacan cinco cosas que tener en cuenta al comprar un monitor.

1 | ¿Para trabajar o para jugar?

Existen monitores para proyectos profesionales, para jugar o para un uso general. Se debe prestar mucha atención a las características y especificaciones, ya que cada uno de estos tipos de monitores ofrece algo distinto.

Un monitor profesional está pensando para proyectos creativos: diseño gráfico, modelado 3D, edición de fotografías y producción de vídeo. Puedes usar un monitor que no esté orientado a dichos objetivos, pero ten en cuenta que los que son profesionales a menudo ya están calibrados para una precisión de color óptima.

Además, este tipo de monitores tienden a usar paneles IPS, conocidos por proporcionar una precisión de color constante y numerosos ángulos de visión. También suelen disponer de una generosa cantidad de puertos para conectividad USB, DisplayPort y HDMI, algo imprescindible para utilizar configuraciones multipantalla y periféricos enchufables.

Por su parte, un monitor gaming está pensando para ofrecer tiempos de respuesta rápidos, tanto si se juega en PC como si se opta por conectarlo a una consola. Es importante valorar las tasas de refresco y tiempos de respuesta, así como la reproducción del color y los ángulos de visión para que la experiencia de juego resulte la más óptima.

2 | El tamaño adecuado

Según sea el trabajo que desarrollar o el tipo de experiencia multimedia que se busca, es clave contar con un tamaño de pantalla idóneo. Por ejemplo, para trabajos de oficina se recomiendan monitores de 22” o 24”, si bien para gaming puede ser más disfrutable apostar por uno de 27” o 28”, aproximadamente.

En caso de emplear dos monitores al mismo tiempo, ya sea por el tipo de trabajo o por la cantidad ventanas y programas abiertos, es posible combinar diferentes tamaños de pantallas. Las combinaciones son muy diversas, aunque lo más importante es que la visión sea agradable y se encuentre a la distancia adecuada.

3 | 4K no significa “mejor”

Es fundamental valorar la resolución de la pantalla, sobre todo si el objetivo es consumir contenido multimedia o jugar a videojuegos. En este caso, es necesario mantener una alta densidad de píxeles a medida que aumenta el tamaño de la pantalla. Así, la combinación de una pantalla de 28” con la resolución Ultra HD 4K (3480 x 2160) ofrece resultados inmejorables.

No obstante, si el objetivo es jugar, hay que asegurarse primero de que la tarjeta gráfica del PC o que la consola es lo suficientemente potente para ejecutar los juegos a dicha resolución. El 4K suele ser recomendable para gráficas de alta gama, diseño gráfico, aplicaciones CAD y entretenimiento. Para tareas que requieran menor potencia, es más factible apostar por la resolución Quad HD 2K o Full HD.

4 | La protección ocular

La salud de nuestros ojos es fundamental. Por eso, muchos monitores cuentan ya con tecnologías que ayudan a cuidar y proteger la vista, evitando que se resienta durante sesiones prolongadas. Por ejemplo, el parpadeo continuo de la luz de fondo de los monitores provoca fatiga ocular, dolores de cabeza y visión borrosa. Ahora, con la tecnología Flicker Free, se evitan los pulsos de luz que causan el parpadeo, y con el modo de luz azul baja se combate la radiación que emite este tipo de espectro de color.

5 | ¿Qué tal un monitor portátil?

El mercado de los monitores portátiles está ganando importancia en los últimos años debido a su diseño versátil y cómodo. Gracias a su peso y grosor, son fáciles de transportar a cualquier parte, lo que les otorga una característica muy útil de portabilidad. Además, al poder ser alimentados vía USB-C con un ordenador portátil, se convierten en una opción muy recomendable para quienes buscan una manera de trabajar ágil y adaptable según las necesidades del momento y el lugar.

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