Intel ha respondido a la gran demanda de chips avanzados en China continental sacando al mercado su procesador Gaudi2. Este movimiento se produce en un momento en que el país se enfrenta a las restricciones de exportación impuestas por Estados Unidos, lo que ha dado lugar a un floreciente mercado de GPUs NVIDIA de contrabando.
En una rueda de prensa celebrada en Pekín, Intel ha presentado el procesador Gaudi2 como alternativa a la GPU A100 de NVIDIA, muy utilizada para entrenar sistemas de IA. A pesar de los controles de exportación de Estados Unidos, Intel reconoce la importancia del mercado chino, ya que el 27% de sus ingresos de 2022 proceden de dicho país.
NVIDIA también ha intentado cumplir las restricciones ofreciendo versiones modificadas de sus GPUs, pero los limitados suministros han impulsado la demanda de GPUs de contrabando. Intel Gaudi2 pretende ofrecer a las compañías chinas varias opciones de hardware y reforzar su capacidad para desplegar IA a través de tecnologías cloud y smart edge. Al asociarse con Inspur Group, un importante fabricante de servidores de IA, Intel tiene previsto construir máquinas con Gaudi2 adaptadas específicamente al mercado chino.
Las pretensiones de China en materia de inteligencia artificial se enfrentan a posibles retos, ya que el Gobierno de Estados Unidos está considerando restringir el acceso de las compañías chinas a los servicios estadounidenses de cloud computing. Esta medida podría dificultar la utilización de chips avanzados de IA por parte de grandes empresas como Amazon Web Services y Microsoft para sus clientes chinos.
Además, existen informes sobre una posible ampliación de la prohibición de exportación de Estados Unidos para incluir la GPU A800 de NVIDIA. Mientras China sigue impulsando sus proyectos de desarrollo de IA, la introducción del procesador Gaudi2 por parte de Intel contribuye a la demanda de chips avanzados del país.
Equilibrar los controles a la exportación y los requisitos tecnológicos dentro de este complejo panorama comercial sigue siendo una tarea crucial tanto para las propias empresas como para los gobiernos implicados en la industria china de la IA.
Vía: TechPowerUp