Intel confirma Coyote Cove y Panther Cove para sus próximos procesadores Nova Lake y Diamond Rapids

Intel confirma Coyote Cove y Panther Cove para sus próximos procesadores Nova Lake y Diamond Rapids

Intel ha despejado dudas sobre su estrategia futura al confirmar en su última actualización de referencia ISA cuáles serán las microarquitecturas que darán vida a sus próximos procesadores de cliente y servidor. Según el documento, los núcleos de alto rendimiento (P-cores) Coyote Cove se utilizarán en la familia Nova Lake, mientras que los P-cores Panther Cove llegarán con la gama de servidores Diamond Rapids.

La confirmación supone el primer reconocimiento público de un roadmap que hasta ahora estaba basado en filtraciones y rumores. Con estos datos, Intel marca su horizonte hasta 2026, con un fuerte foco tanto en mejoras de IPC como en eficiencia energética.

Nova Lake: Coyote Cove + Arctic Wolf

En el ámbito de cliente, Nova Lake combinará P-cores Coyote Cove con E-cores Arctic Wolf, una evolución de los núcleos eficientes pensada para optimizar cargas de trabajo mixtas. También se espera una iGPU actualizada basada en Xe3, lo que refuerza el papel de las integradas en portátiles y equipos compactos.

Los procesadores Nova Lake-S de escritorio podrán escalar hasta 52 núcleos, un salto notable en densidad para la gama mainstream. En el segmento móvil, los modelos HX pondrán el foco en paquetes optimizados para consumo energético, con la iGPU como elemento diferencial.

Otro punto clave es la introducción de un nuevo socket LGA 1954, lo que indica una renovación de plataforma para dar soporte a mayores recuentos de núcleos, controladores de memoria más rápidos y nuevas interfaces de E/S. Intel asegura que se verán mejoras significativas en IPC y rendimiento por vatio respecto a las generaciones actuales con Cougar Cove y Darkmont.

Diamond Rapids: Panther Cove para servidores

En el lado de servidores, Diamond Rapids apostará por núcleos Panther Cove, con el objetivo de maximizar la densidad de núcleos para cargas de trabajo masivas en centros de datos. Su llegada está prevista para la segunda mitad de 2026.

Un detalle llamativo es que las primeras CPUs Diamond Rapids no incluirán Hyper-Threading, una decisión que Intel planea revertir con la futura generación Coral Rapids, donde se reintroducirá la ejecución simultánea de hilos (SMT) para mejorar la eficiencia en workloads paralelos.

Además, se menciona un posible Panther Cove-X orientado a estaciones de trabajo, y la futura Wildcat Lake, que actuará como relevo de Twin Lake en la gama de entrada, esta última todavía con P-cores Cougar Cove y E-cores Darkmont.

Un roadmap más claro hasta 2026

Con esta confirmación, Intel marca un antes y un después en la transparencia de su hoja de ruta. Nova Lake se perfila como la mayor evolución en CPUs de cliente en años, mientras que Diamond Rapids reforzará el segmento servidor con un agresivo salto en escalabilidad, aunque con sacrificios iniciales como la ausencia de SMT.

Vía: TechPowerUp

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