Destiny 2: El regreso de las malas políticas por la puerta grande

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Destiny 2 es una realidad, los dos anuncios del producto han levantado la suficiente expectación para aplaudir su llegada en PC. Por consecuente, tenemos un elemento que es difícil de digerir debido a la naturaleza del anterior titulo y sobre sus políticas.

Antes de ponerme a criticar observemos las siguientes características que presenta el primer videojuego de esta saga. Como ya deben saber, es una saga que esta planeada para los próximos 10 años, por lo que esta »secuela», queda en un segundo plano en Bungie. Hasta la fecha el contenido que han distribuido se transmite en una serie de expansiones que alimenta una practica cada vez más venerada por su audiencia.

Por otra parte, sabemos que empresa lidia con esta popular desarrolladora, y no es descabellado la dirección que puede retomar su siguiente entrega. Hay que recordar que este titulo en la actualidad, cuenta con un respetable número alto de jugadores, y por ende los fans determinan el éxito de esta próxima entrega.

En este punto donde entro en terreno resbaladizo, ya que no pretendo ofender una comunidad que se ilusiona con esta nueva propuesta, pero si protestar para lo que nos viene. Destiny era un videojuego que te ofrece muchísimas horas de diversión, y es por esta la razón, de que sus potenciales consumidores, no tendrán reparos en gastárselo en los próximos contenidos descargables.

Entre los aficionados lo más criticable les ha resultado que se haya anunciado los futuros DLC, antes de que conocer el videojuego »base». Esto no solo abre una nueva brecha en lo que malas políticas se refiere, alimenta de nuevo unas políticas que se consideran obscenas al aficionado. Por supuesto, que el contenido no hay razón de que lo paguemos, pero también es cierto que es indispensable, cuando se ponga de lanzamiento.

Al final, esta doble vara de medir, es lo que permite que las empresas, continúen sangrando de los bolsillos a los jugadores. Si bien, nuestra industria de los videojuegos evoluciona junto con la demanda de los jugadores, parece que al revés, no esta surgiendo efectivo, como es en este caso. Por muchas horas que propicien este titulo, no creo que merezca hacer un gasto enorme, aunque compense. Este tipo de situaciones, deberían regularse y lo mismo que se ha criticado en otros títulos, aquí merece la misma atención.

Una vez más, los jugadores estamos condenados a repetir los mismos errores. Dudo mucho que Destiny 2 vaya a ser mal juego, el anterior tuvo muy buena recepción y por consecuente, esta tendrá un publico mayor. Sin embargo, estamos condicionados, a que la codicia particular sea favorecida, por un publico dócil y poco dispuesto a mover un dedo, en lo que respecta al contenido de pago.

Es una lastima que todavía estemos lidiando con estos aspectos, y del que seguro continuarán los próximos años. Pero hay esperanza, de que incluso Destiny 2 guste al publico, siga protestando por estas malas políticas, que influyen al resto. Soy de esos jugadores, que al inicio me atrajo, pero mi interés se diluyó con el tiempo y observando el camino de esta secuela, baja enteros de forma considerable.

Para finalizar, supongo que tendremos que esperar a que los jugadores, reaccionen ante estos aspectos que se han mantenido desde la anterior generación. Una vez más, espero no herir sensibilidades, y que aquellas personas que lo vayan a disfrutar de Destiny 2, mínimo se replanteen el daño que están haciendo, al alimentar estas practicas.

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