Apple ha decidido recortar la producción de sus gafas Vision Pro y, según The Information, podrían llegar a dejar de fabricarse en noviembre del presente año. Según algunos proveedores implicados en la fabricación de los componentes, la demanda se ha desplomado desde el verano.
Según datos facilitados por Luxshare, el socio chino de Apple que se encarga del ensamblaje final, el número de gafas que se fabrican diariamente se ha visto recortado hasta las 1.000 unidades, es decir, un volumen muy inferior a las 2.000 unidades diarias que se fabricaban con anterioridad. Actualmente, el exceso de inventario de componentes apunta a una capacidad de entre 500.000 y 600.000 gafas.
Tal desaceleración concuerda con lo que Tim Cook, CEO de Apple, afirmaba no hace mucho. Cook señaló que Vision Pro, con su precio base de 3.500 dólares, está dirigido principalmente a los adoptantes tempranos, mientras que el ecosistema más amplio todavía se encuentra en fase de desarrollo.
Si bien es cierto que Vision Pro ha sido elogiado por su pantalla, sus controles gestuales y el hecho de que no requiere de mandos, lo cierto es que está teniendo algunos problemas con el grado de interés de los desarrolladores.
Hasta la fecha, las grandes plataformas como Netflix y YouTube no se han sumado a la iniciativa, sino que se limitan a dirigir a los usuarios hacia sus páginas web en lugar de crear aplicaciones específicas.
Sin embargo, la producción sigue siendo flexible, por lo que Apple puede reanudarla si la demanda vuelve a repuntar. Sus componentes, además, podrían aprovecharse en futuros modelos, quizá con mejores procesadores o incluso una versión más económica.
Existen rumores acerca de que Apple habría cambiado su enfoque para trabajar en un modelo Vision Pro más asequible, que podría atraer un mayor interés por parte de los consumidores y fomentar una mayor cooperación por parte de los desarrolladores.
Vía: NotebookCheck