AMD ha ampliado su catálogo profesional con las nuevas Radeon AI PRO R9700S y R9600D, tarjetas basadas en Navi 48 y arquitectura RDNA 4 que apuntan a entornos de IA, visualización avanzada y cómputo intensivo. Ambas incorporan 32 GB de GDDR6, un bus de 256 bits y un ancho de banda de 640 GB/s, cifras claves para entornos donde los modelos de gran tamaño requieren memoria abundante y acceso sostenido a altas velocidades.
La compañía busca ofrecer una plataforma profesional coherente, con mayor capacidad de memoria, consumo escalado y una arquitectura homogénea para clientes que despliegan múltiples nodos de trabajo y necesitan un comportamiento constante en escenarios de uso continuo.
Arquitectura Navi 48 con diferencias claras entre la R9700S y la R9600D
La Radeon AI PRO R9700S equipa la versión completa del silicio Navi 48, con 64 Compute Units, 4.096 Stream Processors y un rendimiento pico de 47,8 TFLOPS FP32 gracias a un boost de 2.920 MHz. Su consumo asciende a 300W, orientado a servidores donde el rendimiento absoluto tiene prioridad.
La Radeon AI PRO R9600D, por su parte, reduce la configuración a 48 CUs y 3.072 SPs, situándose alrededor de 24,8 TFLOPS FP32 con un boost de 2.020 MHz y un consumo más contenido de 150W. Ambas comparten los 32 GB de GDDR6, lo que asegura un búfer amplio para cargas de simulación, renderizado profesional y procesamiento multimodal.
Refrigeración pasiva y requisitos estrictos de flujo de aire en servidores
AMD adopta un diseño de refrigeración pasiva en ambas tarjetas, eliminando el clásico blower y confiando la disipación a flujos de aire de alta presión generados por el propio chasis. Esta solución, habitual en nodos de densidad elevada, requiere ventiladores industriales, canales de aire directos y un diseño térmico optimizado para uso 24/7 en racks profesionales.
El equipo técnico deberá garantizar un entorno con movimiento de aire constante, especialmente en configuraciones que integren el modelo superior de 300W, donde la estabilidad térmica es crítica para mantener el rendimiento sostenido en cargas de IA.
Conectividad, alimentación y disponibilidad pendiente de confirmación
Ambas tarjetas incluyen un conector 12V-2×6, adoptado ya como estándar en hardware profesional, y ofrecen cuatro DisplayPort 2.1a, adecuados para sistemas avanzados de visualización y análisis. Pese a su presentación técnica, AMD no ha revelado todavía precios ni fechas de envío, información que previsiblemente dependerá de la demanda en centros de datos y del despliegue de infraestructuras de IA durante 2026.
El lanzamiento consolida una estrategia clara: ofrecer tarjetas profesionales con gran capacidad de memoria, ancho de banda de 640 GB/s, arquitectura RDNA 4 optimizada para cargas de IA, consumo escalado y un comportamiento térmico adaptado a servidores, donde la refrigeración depende de flujos de aire de alta presión, ventiladores industriales y chasis diseñados para trabajo continuo, en lugar de un diseño convencional de disipador activo.
Vía: TechPowerUp



















