Google está desarrollando una actualización de Android que permitirá a los usuarios habilitar simultáneamente las bandas 2.4 GHz y 6 GHz al crear un punto de acceso Wi-Fi. Esta nueva función, descubierta en el código de desarrollo del sistema, permitirá que el sistema operativo gestione automáticamente la banda más adecuada según el dispositivo conectado. El cambio busca optimizar el tethering móvil en un ecosistema donde conviven dispositivos antiguos que dependen de 2.4 GHz con equipos modernos compatibles con Wi-Fi 6E y Wi-Fi 7, garantizando una experiencia más homogénea.
Hotspots más adaptativos y eficientes
La actualización permitirá a Android anunciar simultáneamente las bandas 2.4 GHz y 6 GHz, dejando que el propio sistema decida cuál utilizar en función del cliente. Los dispositivos con soporte limitado se conectarán a 2.4 GHz para mantener la compatibilidad y mayor rango, mientras que los más recientes usarán 6 GHz para beneficiarse de menor latencia, mayor velocidad y ancho de banda ampliado.
El objetivo de esta implementación es ofrecer una gestión similar a la de los routers domésticos inteligentes, que distribuyen automáticamente los dispositivos según su capacidad. De este modo se reducirán cortes de conexión, se optimizará la negociación de frecuencia y se mejorará la eficiencia energética del módem Wi-Fi. Además, el uso combinado de bandas permitirá que los usuarios alternen entre trabajo remoto, juego online o streaming 4K sin modificar manualmente los parámetros de conexión.
Despliegue progresivo y factores de compatibilidad
Aunque la función aún no está disponible en ninguna versión estable de Android, ya se han detectado referencias directas en las compilaciones de prueba. Su implementación dependerá de la compatibilidad del hardware, las limitaciones regionales de espectro y las decisiones de los fabricantes (OEM). Algunos teléfonos equipados con radios 6 GHz tienen bloqueada la función de hotspot de alta frecuencia por motivos de certificación, lo que provocará un despliegue escalonado en distintos mercados.
Aun así, la función apunta a una mejora sustancial en la infraestructura Wi-Fi móvil, acercando a Android al comportamiento de los routers Wi-Fi 6E de gama alta. El uso combinado de bandas proporcionará conectividad más estable, reducción de interferencias y rendimiento sostenido en escenarios donde se conectan múltiples dispositivos.
Evolución hacia la automatización total de la conectividad
Este cambio refleja el rumbo de Google hacia una gestión de red más automatizada, donde Android decide internamente qué banda ofrecer para mantener rendimiento óptimo y baja latencia. Los usuarios ya no tendrán que preocuparse por la elección entre 2.4 GHz y 6 GHz, ya que el sistema ajustará la conexión en función del entorno, el nivel de señal y las capacidades del cliente.
A medida que el Wi-Fi 7 gane presencia en portátiles, tablets y smartphones, esta automatización se convertirá en una pieza clave para la experiencia de red móvil. Aunque el cambio será invisible a simple vista, representa una evolución técnica real en la gestión de redes personales, alineando a Android con las expectativas de conectividad de la próxima generación de usuarios.
Vía: Guru3D


















