La Steam Deck de Valve, pensada principalmente para juegos modernos bajo SteamOS, ha vuelto a sorprender gracias a los entusiastas del retro. El desarrollador Bob Pony ha conseguido arrancar Windows 7 de forma nativa en el dispositivo, demostrando que incluso un sistema operativo lanzado en 2009 puede ejecutarse en hardware actual como la APU AMD Van Gogh. Sin embargo, la hazaña tiene una gran limitación: la pantalla solo funciona en modo vertical, lo que afecta gravemente la usabilidad.
Windows 7 en la Deck: ¿qué funciona y qué no?
Según las pruebas preliminares, la pantalla táctil y los botones del mando funcionan correctamente. Esto indica que ciertos controladores básicos son compatibles con Windows 7. Sin embargo, la GPU personalizada de la Steam Deck carece de drivers oficiales para este sistema, lo que impide aprovechar la aceleración por hardware. Como resultado, los gráficos se renderizan por software, lo que reduce el rendimiento y aumenta el consumo energético, un punto crítico en un dispositivo portátil.
El problema principal reside en que los drivers de la iGPU solo existen para Windows 10 y 11. Aunque algunos usuarios están probando soluciones como modificaciones del registro o inyecciones de driver, hasta ahora ninguna ha permitido rotar la pantalla ni activar la aceleración gráfica de forma estable.
¿Retroinformática en el bolsillo?
No es la primera vez que Bob Pony logra este tipo de instalación: ya en 2023 consiguió hacer funcionar Windows 8.1 en la Steam Deck, con buenos resultados en términos de interfaz táctil. Esto abre la puerta a usar la consola como plataforma de pruebas para aplicaciones antiguas, software corporativo o incluso juegos clásicos.
Aunque usar Windows 7 en retrato limita bastante la experiencia, el experimento sirve como prueba del potencial técnico de la Steam Deck más allá del gaming moderno. Algunos foros ya debaten la posibilidad de ver pronto Windows Vista o incluso XP funcionando en la consola de Valve, aunque las dificultades técnicas aumentan con cada versión anterior.
SteamOS como heredero natural
Mientras tanto, y con el soporte de Windows 10 entrando en su recta final, muchos usuarios podrían recurrir a SteamOS como sustituto flexible y compatible para sus necesidades, sobre todo si se amplía su compatibilidad con software retro. En este contexto, experimentos como el de Pony revalorizan el rol de la Steam Deck como una máquina versátil tanto para jugar como para trastear.
Por ahora, Windows 7 en la Steam Deck sigue siendo un concepto experimental, ideal para nostálgicos con ganas de cacharrear. Pero si te animas, prepárate para ISO modificadas, línea de comandos y caza de drivers. Eso sí: tendrás un Windows 7 portátil en la palma de tu mano… aunque en vertical.
Vía: Guru3D
