
Desde los días del asequible Pixel 8, se había rumoreado que Google planeaba cambiar de proveedor para la fabricación de sus chipsets Tensor. Finalmente, la compañía ha confirmado el cambio para el Tensor G5 que debutará en el Pixel 10 de 2025. Esta es una noticia relevante tanto para el mercado de los smartphones como para la industria de los semiconductores, ya que marca un giro importante en la estrategia de fabricación de Google.
Adiós a Samsung: TSMC tomará las riendas de los chipsets Tensor
Hasta ahora, los chips Tensor de Google se fabricaban bajo el proceso de Samsung, pero con el Tensor G5, Google opta por TSMC, el líder mundial en fabricación de semiconductores. El G5 será fabricado en el nodo de 3nm de TSMC, una tecnología utilizada en los smartphones de gama alta más recientes, lo que promete un gran avance en eficiencia y rendimiento.
Google, además, ha firmado un contrato con TSMC para fabricar sus chips Tensor hasta al menos el Pixel 14 (2029), lo que asegura que los chips de Google serán fabricados por TSMC durante varios años.
Samsung pierde un cliente importante
Este cambio supone un duro golpe para Samsung, cuyo negocio de fundición está perdiendo terreno rápidamente. Según informes de la industria, la perdida de Google como cliente ha generado una profunda reflexión interna en Samsung Foundry, que lucha no solo con los rendimientos de su nodo 3nm, sino también con las restricciones en la propiedad intelectual de sus procesadores Exynos.
Aunque el Pixel 10 mantendrá un módem Exynos 5G para controlar los costos, su procesador Tensor G5 ya no será fabricado por Samsung, lo que resalta las crecientes dificultades de la empresa en este campo.
TSMC: una solución viable para Google
Por su parte, TSMC ha demostrado ser capaz de adaptarse a las necesidades de Google, y la capacidad de la empresa para fabricar chips de alto rendimiento con su proceso de 3nm es una razón clave para que Google haya dado este paso. Aunque los Pixel todavía representan un mercado de nicho dentro del ecosistema Android, la creciente ambición de Google con su gama Pixel hace que este cambio a TSMC sea estratégico, pues al no depender de Samsung, Google podrá contar con mayor control sobre la producción y reducir su dependencia de uno de sus competidores más cercanos.
Vía: NotebookCheck