Unos científicos de la Universidad de California, Riverside, han hecho un gran avance con un nuevo material que tiene la capacidad de autorepararse más allá de cortes y arañazos. El material conductor de tipo caucho está hecho de un polímero estirable y una sal iónica.
Tiene la capacidad de estirar hasta 50 veces su tamaño habitual y la mayor ventaja de dicho material, es que es capaz de repararse completamente en menos de 24 horas.
Se especula que los primeros smartphones que contarían con esta tecnología, llegarían en 2020 y su uso no se limitaría tan solo a paneles, también podría usarse en baterías.
Sin duda alguna, una estupenda noticia y que si se acaba cumpliendo, estaríamos hablando de un gran avance tecnológico.