La industria del videojuego avanza de forma clara hacia el modelo multiplataforma, impulsado por títulos cross-play, servicios persistentes y un público cada vez más diverso. Sin embargo, las exclusivas de consola siguen teniendo un peso estratégico, al menos para determinadas sagas. Así lo cree Shawn Layden, exdirectivo histórico de PlayStation, que ha vuelto a poner el debate sobre la mesa.
Durante su intervención en el pódcast Pause for Thought, Layden dejó claro que no todos los juegos deberían ser exclusivos, pero defendió que, mientras existan plataformas diferenciadas, las exclusivas continúan aportando un enorme valor de marca. En su opinión, algunas franquicias están tan ligadas a su sistema que separarlas de él diluye su identidad.
Las sagas que definen una plataforma
Layden explicó que ciertos personajes y universos se han convertido en símbolos directos del hardware que los vio nacer. Puso como ejemplos a Mario en consolas de Nintendo, o a Nathan Drake, protagonista de Uncharted, como emblema de PlayStation.
Según Layden, muchos jugadores toman decisiones de compra de hardware en función de estas sagas concretas. No se trata solo del juego en sí, sino del ecosistema completo que lo rodea. En ese contexto, perder la exclusividad puede reducir el impacto diferencial de una consola frente a sus competidores.
Hardware y juegos pensados como un todo
Otro punto clave de su argumentación es que cada consola ofrece capacidades únicas. Layden recordó cómo títulos como Astro Bot fueron diseñados específicamente para mostrar las posibilidades del mando DualSense de PlayStation 5, algo difícil de trasladar intacto a otros sistemas.
También mencionó los esfuerzos de Nintendo por experimentar con nuevos esquemas de control, como el modo ratón de los Joy-Con en la futura Nintendo Switch 2. En su opinión, si estos juegos se trasladan sin restricciones a otras plataformas, pierden parte de su razón de ser como demostraciones técnicas del hardware.
Multiplataforma sí, pero no siempre
Layden reconoce que no todos los géneros encajan bien con la exclusividad. Los juegos multijugador y los live service se benefician claramente de llegar al mayor número posible de usuarios. Este enfoque encaja con decisiones recientes de Sony, como llevar Helldivers 2 a otras plataformas.
Sin embargo, sostiene que los títulos narrativos para un jugador siguen teniendo más sentido como exclusivas. Puso como ejemplo Ghost of Yotei, que continuará siendo exclusivo de PS5, aunque con la habitual excepción del lanzamiento posterior en PC, una estrategia ya asentada en Sony.
¿Un futuro sin exclusivas?
A largo plazo, Layden admite que el modelo tradicional de consola podría cambiar. La idea de un único dispositivo capaz de ejecutar todo resulta atractiva para muchos usuarios. Microsoft apuesta por el PC con Windows como eje del ecosistema Xbox, mientras que Valve busca ampliar su alcance con propuestas como Steam Machine.
Aun así, el exdirectivo cree que el público de consola y el de PC siguen siendo diferentes. Muchos usuarios valoran la simplicidad, el formato cerrado y la experiencia directa del salón. Mientras esa separación exista, las exclusivas seguirán teniendo sentido, al menos hasta que alguien logre unir definitivamente el escritorio y el sofá en una misma experiencia.
Vía: NotebookCheck


















