Sony ha presentado su nuevo sensor LYT-901 de 200 MP, un componente destinado a impulsar la próxima generación de cámaras móviles de gama alta. Sin embargo, las últimas filtraciones apuntan a que Samsung no lo implementará en sus smartphones insignia, contradiciendo previsiones anteriores que situaban este sensor en el futuro Galaxy S27 Ultra, previsto para 2027. La decisión habría sorprendido a parte del sector, ya que el nuevo componente prometía una mejora significativa respecto a las soluciones actuales.
El Sony LYT-901, perteneciente a la familia LYTIA, destaca por su tamaño de 1/1,12 pulgadas, superior al 1/1,3 pulgadas del ISOCELL HP2, sensor que Samsung emplea en sus modelos de gama alta más recientes. Sobre el papel, el aumento de superficie fotosensible supondría una mejora directa en la captura de luz, el rango dinámico y la profundidad de color, características clave en fotografía profesional móvil.
Filtraciones apuntan a continuidad en el Galaxy S27 Ultra
Según el conocido filtrador Ice Universe, Samsung no planea adoptar el nuevo sensor de Sony en su próximo buque insignia. En su lugar, la marca surcoreana mantendría un sensor de 1/1,3 pulgadas, muy similar al que equipa actualmente en el Galaxy S24 Ultra y S25 Ultra, apostando por ajustes incrementales en lugar de un salto tecnológico.
Esta estrategia sugiere una política de evolución conservadora en el hardware fotográfico, priorizando la madurez del procesamiento de imagen y las mejoras en IA computacional sobre la adopción de nuevos sensores externos. Aunque la elección puede parecer modesta, Samsung ha demostrado que su software de imagen es capaz de compensar en gran medida las diferencias de tamaño de sensor mediante algoritmos avanzados de fusión y HDR adaptativo.
Un contraste con la apuesta de Sony y otros fabricantes
El Sony LYT-901 representa la nueva punta de lanza del fabricante japonés en sensores móviles, diseñado para ofrecer una mayor sensibilidad lumínica y un ruido reducido incluso en entornos con baja iluminación. Con 200 MP efectivos y tecnología de agrupamiento 16-en-1, el sensor podría marcar un nuevo estándar en fotografía de alta resolución para smartphones premium de marcas como Xiaomi, OPPO o Vivo, que ya han mostrado interés en integrarlo.
En cambio, Samsung parece decidida a mantener la continuidad de su propio ecosistema ISOCELL, reforzando su independencia tecnológica y control de producción. Si la filtración se confirma, el Galaxy S27 Ultra mantendría una evolución interna más moderada, con mejoras centradas en la óptica periscópica, la estabilización avanzada y la integración de IA generativa en la cámara.
Perspectivas para el sector fotográfico móvil
Aunque un sensor de 1/1,3 pulgadas sigue siendo competitivo, el movimiento de Samsung podría alimentar la percepción de estancamiento en su gama Galaxy S, mientras rivales asiáticos aceleran la adopción de componentes de mayor tamaño. En un contexto donde la fotografía móvil de 1 pulgada se consolida entre los fabricantes chinos, esta elección reafirma el enfoque de la marca surcoreana en la optimización de software antes que en la renovación radical del hardware.
De momento, Sony continúa ganando protagonismo como proveedor de referencia en sensores de imagen, mientras que Samsung refuerza su identidad mediante soluciones propias. El equilibrio entre ambos gigantes marcará la dirección del sector de cámaras móviles en los próximos años.


















