El mundo del overclock extremo vuelve a sorprender con una nueva marca mundial. El reconocido overclocker SaltyCroissant ha conseguido llevar la memoria DDR5 a una frecuencia de 13.020 MT/s (DDR5-13020), lo que equivale a 6510 MHz efectivos. Esta cifra establece un nuevo récord absoluto y demuestra hasta dónde pueden llegar los módulos de memoria actuales con el hardware y la refrigeración adecuados.
Configuración del récord
Para lograr esta hazaña se utilizó un módulo Corsair Vengeance DDR5-7600, instalado en una placa base GIGABYTE Z890 AORUS Tachyon Ice, un modelo diseñado específicamente para entusiastas del overclock. El sistema estaba impulsado por un Intel Core Ultra 7 265K, acompañado de un sistema de refrigeración extrema, imprescindible para mantener la estabilidad a semejantes frecuencias.
Los parámetros alcanzados reflejan la magnitud del reto:
- Frecuencia: 6510 MHz (13.020 MT/s).
- Relación FSB:DIMM: 3:188.
- Timings: 68-128-128-256 T.
- Controlador de memoria: 1627,5 MHz en modo Gear 4.
Importancia del logro
Este récord no solo demuestra las capacidades de los módulos Corsair Vengeance DDR5, sino también el potencial de las placas base entusiastas como la GIGABYTE Tachyon Ice, creadas para romper barreras en entornos de refrigeración extrema. Aunque estas cifras no son alcanzables en condiciones de uso cotidiano, marcan un hito en la evolución de la memoria DDR5 y sirven de referencia para los fabricantes a la hora de mejorar compatibilidad, controladores y estabilidad.
Contexto en la comunidad OC
Los récords de memoria en HWBOT y plataformas similares son un campo de competición constante entre overclockers de todo el mundo. Con esta marca, SaltyCroissant coloca el listón más alto y posiciona a Corsair y GIGABYTE como protagonistas de la escena entusiasta. Se espera que en los próximos días se publique la validación oficial en HWBOT, lo que consolidará la cifra dentro del ranking global.
Mirando al futuro
Mientras la memoria DDR5 sigue extendiéndose en equipos de consumo y entornos profesionales, estos logros extremos ayudan a explorar los límites de la tecnología. No es descabellado pensar que, con nuevas revisiones de chips DRAM y controladores más optimizados, se alcancen frecuencias aún más altas en los próximos años.
Vía: TechPowerUp
