En los mercados globales de Europa y Norteamérica se ha registrado un notable descenso de los precios de las tarjetas gráficas, incluida las últimas RTX 40. Esta tendencia apunta a posibles dificultades de venta que podría estar experimentando NVIDIA.
El gigante tecnológico se enfrenta principalmente al reto de liquidar sus excedentes de tarjetas gráficas, una situación que podría acarrearle considerables contratiempos financieros. Para mitigar esta situación, NVIDIA se plantea reducir la producción de GPU.
Un reciente estudio de Arete Research revela que NVIDIA es una de las seis compañías de la lista privilegiada de TSMC con un inventario superior a la media de 92 días. El ciclo de inventario de NVIDIA se sitúa actualmente en torno a los 220 días, casi dos veces y media la duración estándar.
Esto sitúa a NVIDIA entre las cinco compañías que han superado el «umbral de precaución». NVIDIA pretende reducir su producción para proteger a sus socios comerciales de una situación similar. Sin embargo, obstáculos generales del mercado como la elevada inflación y la recesión económica complican la situación.
El efecto dominó de este escenario puede suponer un reto para toda la industria. Las ventas de tarjetas gráficas, incluida la RTX 4070, junto con otros modelos de GPU de Intel y AMD, han tocado techo. En consecuencia, TSMC ha recortado la producción de componentes y tecnología, lo que repercute directamente en los contratos y adquisiciones de determinadas compañías, al tiempo que influye en la demanda mundial de tecnología y componentes.
Para evitar una posible catástrofe en el mercado, es posible que las firmas tecnológicas tengan que adoptar diversas estrategias, como reducir los precios de las tarjetas gráficas. Aunque esto podría proporcionar rápidos resultados, ninguna empresa ha hecho declaraciones oficiales al respecto. NVIDIA se enfrenta a un grave problema de inventario y la reducción de la producción de GPU parece ser una estrategia de mitigación viable.
Sin embargo, la inflación desorbitada del mercado y la recesión económica plantean importantes retos. Es necesaria una acción colectiva del sector para evitar una posible crisis. Bajar los precios de las tarjetas gráficas podría ser una solución viable, pero aún no existen anuncios oficiales al respecto.
Vía: Guru3D