El fabricante Lenovo ha lanzado dos nuevos monitores ThinkVision, el P27pz-30 y el P32pz-30. Ambos modelos están equipados con tecnología de atenuación local de 1.152 zonas y un brillo máximo de 1.200 nits. Estos monitores de oficina no solo disponen de 1.152 zonas de atenuación local y un brillo máximo de 1.200 nits, sino que además incorporan una entrada USB4.
Lenovo ha optado por paneles IPS, algo poco habitual en los monitores Mini LED, y ambos modelos presentan una resolución de 3840 x 2160, un brillo típico de 650 nits, certificación DisplayHDR 1000, una relación de contraste de 1000:1 y un tiempo de respuesta de 4 o 6 ms según el modo.
También es compatible con el 99% de Adobe RGB y el 98% de la gama de colores DCI-P3, si bien el panel sigue siendo de 8 bits+FRC y no de 10 bits. El inconveniente, te estarás preguntando, una frecuencia de actualización de 60 Hz, que casi parece un delito, pese a tratarse de monitores orientados a la productividad.
En términos de conectividad, prácticamente no se echa en falta nada, ya que además de la entrada USB4 que también admite el modo DP Alt y 140 W USB PD, ambos monitores también disponen de dos puertos HDMI 2.1 así como una entrada DP 1.4 y una salida DP 1.4. Asimismo, existe una entrada USB Type-C 3.2 Gen 2, una salida USB Type-C 3.2 Gen 2 con soporte USB PD de 15W, cuatro puertos USB Type-A 3.2 Gen 2, un puerto Gigabit Ethernet y una salida de audio de 3,5 mm.
La solución USB4 parece estar basada en los dispositivos endpoint VL830 o VL832 de VLI debido a la ausencia de cualquier tipo de salida USB4. Ambos modelos también incorporan funciones KVM, un sensor inteligente y una fuente de alimentación interna, así como un soporte ajustable en altura que también se puede inclinar y girar.
El punto negativo está en el precio, ya que Lenovo propone nada menos que 1.699€ para el P27pz-30 de 27 pulgadas y 1.999€ para el P32pz-30 de 32 pulgadas.
Vía: TechPowerUp