El próximo año 2021 el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital destinará 4.230 millones de euros a digitalización y telecomunicaciones, una cantidad que supera con creces los 718 millones que se dedicaron en 2020. Una buena prueba de que la pandemia ha acelerado la digitalización de las empresas y ha puesto en relieve la importancia de que las compañías cambien su organización, sus herramientas y sus modelos de negocio para adaptarse a los nuevos tiempos.
Con el cierre del año y tras haber vivido una situación completamente imprevisible, todas las compañías se plantean en su balance de fin de año cómo seguir impulsando sus negocios ante un 2021 todavía incierto. Por este motivo, los expertos de Entelgy, The BusinessTech Consultancy analizan las tendencias que moldearán los negocios desde un punto de vista digital en el próximo año, que si quieren ser competitivas, deben transformarse de raíz:
- Negocios modulares (composable businesses). Para impulsar una transformación digital más rápida, las organizaciones necesitan ser más ágiles en su conjunto y no solo implica los departamentos de TI. Al contrario, deben apoyarse en estas áreas para reorganizar sus unidades de negocio. Según Gartner, las compañías se convertirán en negocios modulares. Es decir, para lograr una transformación digital completa las empresas pivotarán sobre varios módulos de negocio, lo que les permitirá ser más resilientes ante situaciones como la vivida por el COVID-19 y reaccionar de forma más rápida. Para lograr este cambio se deben aprovechar todos los datos disponibles, con herramientas basadas en big data, y garantizar un acceso a la información a toda la empresa para poder reaccionar más ágilmente.
- Servicios hiper-personalizados. Muchas empresas han tenido que redefinir sus objetivos con el inicio de la pandemia y han apostado por la personalización para llegar mejor al usuario final. En este sentido, la proliferación de los productos bajo un modelo como servicio, basado en el uso y apoyado por la analítica de datos y la popularización del cloud computing, permite a las empresas adaptarse completamente a las necesidades del cliente, para personalizar la experiencia y el producto contratado. Por ejemplo, se ha demostrado que los clientes que siguen recomendaciones basadas en IA gastan un 14% más.
Prueba de ello es la cada vez más creciente demanda de soluciones “Software as a Service” que, según cifras de la consultora IDC, utilizan un 89% de las compañías, con herramientas como Microsoft 365 o Google Gsuite . Estos servicios basados en la nube permiten modificar la infraestructura o las soluciones el doble de rápido y esta escalabilidad es clave para suplir las necesidades de cada cliente, así como afirma también que un 80% de las empresas apostarán por cambiar hacia un modelo con el Cloud como pilar principal a finales de 2021.
- Estrategia definida en el uso y adopción de Inteligencia Artificial. La Inteligencia Artificial viene siendo tendencia desde hace algunos años, pero ahora las compañías deben pasar ya al siguiente nivel en su uso e implementación. En el próximo año, la fase de pilotaje y pruebas de concepto pasará definitivamente a modelos en producción que den un uso comoditizado de la IA. Su utilización general en diferentes casos de uso en la empresa elevará el modelo a la denominada ingeniería de IA, según Gartner, lo que implicará mayor robustez y fiabilidad en los modelos, y redundará en un retorno y entrega de valor mayores en el contexto empresarial. En este sentido, es de esperar que la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), presentada por el Gobierno, que prevé una inversión de 600 millones de euros entre 2021 y 2023 y contempla 30 medidas a ejecutar de aquí a 2025, supondrá un claro impulso para esta tecnología.
- Auge de la automatización robótica de procesos (RPA). La adopción de herramientas que permitan mecanizar tareas rutinarias para agilizar el desempeño general de la compañía permite liberar a los equipos de tener que realizar ciertos trabajos para dedicarse a otras tareas de mayor valor añadido. La automatización de procesos será una de las tendencias de 2021 para mejorar la eficiencia operativa. Sin duda, la situación vivida este año ha impulsado la adopción de esta tecnología, con un 53% de las empresas que afirman que han comenzado algún proyecto de automatización según la última encuesta de Deloitte, en la que además se refleja que el porcentaje de compañías con RPA alcanzará el 72% en los próximos dos años.
- La importancia de la ubicación. La pandemia ha demostrado que compartir ubicación geográfica no es imprescindible y los empleados, clientes y organizaciones pueden estar físicamente en lugares distintos. Este factor supone un nivel más en la transformación digital de las empresas: lograr la independencia geográfica requiere un cambio tecnológico para desarrollar esta nueva forma de negocio. Paradójicamente, los servicios estarán más cerca del usuario final (el 80% de la inversión en computación en el Edge estará motivado por la pandemia, según IDC), por lo que empresas dedicadas a servicios de internet sí que tendrán prestar atención a tener presencia allí donde prestan servicios, adaptando sus infraestructuras digitales. En este sentido, las organizaciones tendrán un modelo más disperso en cuanto a localización geográfica, un modelo denominado “digital first, remote first”.
“Una gran cantidad de empresas se han dado cuenta, tras la irrupción del coronavirus, que su grado de digitalización no era el adecuado. Más allá de integrar herramientas tecnológicas, las organizaciones tienen que cambiar ciertos procesos y esquemas organizativos para adaptarse a la era digital. En estos casos, la tecnología tiene que ser el vehículo facilitador para lograr la transformación digital completa”, afirma Miguel Ángel Barrio, responsable de Entelgy Digital.