Este año la “vuelta al cole” 2020 va a tener unas características inéditas hasta el momento. Los últimos datos de contagios y rebrotes por coronavirus en España mantienen encendido el debate sobre la apertura del curso escolar 2020/2021 y sobre las condiciones en las que se producirá, ya sea de forma presencial, online o en régimen de semipresencialidad como ya proponen algunas Comunidades Autónomas. Sea de una forma u otra, los expertos coinciden en que parte del curso académico se desarrollará de forma telemática y se continuará impulsando la formación a distancia. Además, a todo ello deberá sumarse un aspecto clave para las comunicaciones remotas de los estudiantes como es su ciberseguridad, ya que los ciberdelincuentes no han dejado pasar ni un instante para aprovechar esta pandemia mundial en su propio beneficio. Y es que, tal y como desvelaba el informe “El estado de la seguridad en la nube 2020” de la empresa de ciberseguridad Sophos Iberia, hasta el 57% de las empresas españolas han reconocido haber sido víctimas de ciberataques por malware, ransomware, robo de datos, intentos de comprometer sus cuentas o cryptojacking. Y no solo las empresas, ya que los ataques a las conexiones entre los hogares de los estudiantes y los servidores de los centros educativos y/o profesores son otro jugoso objetivo para estos mismos cibercriminales.
La educación online y la necesidad de sustituir, al menos en parte, las lecciones tradicionales por la conexión a plataformas y la comunicación cada vez más a través de Internet, ha llevado a un aumento significativo del tiempo que los niños y adolescentes pasan conectados. Según datos recogidos por Unicef, el confinamiento ha disparado el uso de las pantallas en menores. Antes de la adopción de las medidas de cuarentena, sólo el 15% de los niños y niñas españoles usaba estos dispositivos más de 90 minutos al día, durante el confinamiento, ese porcentaje ha aumentado hasta el 83%.
Con el aumento del tiempo que los menores pasan en Internet, también aumentan los riesgos a los que se exponen a causa de la despreocupación o el uso imprudente y descontrolado de la red. Las principales amenazas a las que se enfrentan los menores en internet se concentran en prácticas de ciberacoso o ciberbulling, prácticas de sextorsión, el acceso a contenido inapropiado o la revelación de información por parte de los menores, así como el online grooming o ciberembaucamiento, un delito por el cual una persona adulta contacta electrónicamente con un menor para ganarse su confianza e involucrarle en una actividad sexual. Según el informe “Violencia Viral”, elaborado por Save the Children en 2019 los tipos de violencia más sufridos por los menores son la exposición a contenidos de carácter sexual y o violento sin consentimiento, un 51,12% afirma haber sido víctima en alguna ocasión. En segundo lugar, se sitúa el ciberacoso, un 39,65% de los menores ha sido víctima de ciberacoso al menos en una ocasión y el 27,43% entre una y dos veces. El tercer ciberdelito más habitual es el online grooming o ciberembaucamiento, por el que un 21,45 % de los menores ha sido víctima de este delito cibernético durante su infancia.
Además de la presencia constante de estas amenazas en Internet, los cibercriminales también aprovechan la vulnerabilidad de los menores para acceder a sus dispositivos y robarles su información. Para prevenir un aumento de los riesgos y permitir una “vuelta al cole” atípica pero #cibersegura de los más pequeños, los expertos en ciberseguridad de Sophos Iberia muestran cuáles deben ser las 5 claves y aspectos fundamentales para hacer que el uso de dispositivos y de la red sea lo más seguro posible:
- Contraseña = protección. Es importante explicar a los menores la importancia de la privacidad y los comportamientos que deben seguir y qué deben evitar en la web, así como hacerles conscientes de los riesgos que pueden correr. Los niños y jóvenes también utilizan Internet para informarse y comprender que está ocurriendo con la crisis del coronavirus, además de para luchar contra el aburrimiento. El uso de una buena contraseña y la importancia de no repetirlas ni compartirlas, les ayudará a proteger sus movimientos en internet.
- Comprueba los sitios a los que acceden, el tipo de canales de entretenimiento que visitan con frecuencia. Este pequeño gesto por parte de los padres les permitirá conocer los hábitos de navegación de sus hijos y poder intervenir con rapidez si se encuentran con situaciones peligrosas.
- Protege tus dispositivos con el Control Parental Web. Para obtener una protección completa contra el malware avanzado, es necesario implementar una solución antivirus que vaya más allá de las opciones tradicionales. Sophos Home, que se puede descargar de forma gratuita, cuenta con protección frente a programas espía, alertas de encendido de la webcam, además de con un filtro web para menores que permite comprobar el contenido online que pueden ver los niños. Solo es necesario seleccionar las categorías del filtro dependiendo de si se trata de un contenido solo para adultos, un contenido potencialmente inapropiado o páginas de blogs y redes sociales.
- Dedica tiempo a configurar el control parental con cuidado. Según el Informe de Save the Children, el 52% de los menores no tenían restricciones para acceder a internet, y entre los que sí tenían limitaciones por parte de sus padres, estas se basaban en el límite de horas y la explicación de los riesgos. Para una conexión segura de los niños no basta con tener el Control Parental Web activado, es esencial configurar funciones específicas que ayuden a controlar lo que los menores pueden ver en internet y lo que deben evitar. Es fundamental dedicar el tiempo necesario a seleccionar las categorías de filtro apropiadas y revisar las configuraciones.
- Redes sociales: Mucha precaución. Es importante explicar a los niños que es muy difícil eliminar algo de internet de forma fiable una vez que se ha compartido y que por eso hay que seguir las mismas reglas que siguen en su vida cotidiana en la escuela, con la familia o con los amigos. Una forma sencilla y eficaz de enseñar a los niños y adolescentes a asumir las consecuencias de lo que comparten y comentan en Internet es hacer que lo digan en voz alta: si es algo que nunca dirían en la vida real mirando a otra persona… entonces no deberían tampoco decirlo en un contexto virtual.
- Su información puede ser tu información. En ocasiones compartimos nuestros dispositivos móviles (ordenadores, tablets, móviles, etc.) con nuestros hijos. En estos dispositivos solemos tener guardada información sensible como contraseñas, números de tarjeta de crédito/débito e incluso tener accesible información de nuestra empresa. Es importante revisar que nuestros hijos no puedan acceder a nuestras cuentas, realizar pagos sin consentimiento y, sobre todo, en caso de ser nuestra herramienta de trabajo, proteger estos dispositivos con sistemas de protección avanzada para empresas como la solución de Sophos Intercept X, galardonada por su nivel de protección frente a Ransomware (robo, secuestro y destrucción de datos), exploits (manipulación de software vulnerable o no actualizado) y protecciones Anti-Hacking.