
La firma JONSBO ha presentado su nueva caja T9, un chasis Mini-ITX de 11 litros que destaca por su diseño premium y la combinación de materiales poco habituales en este segmento. Su estructura está fabricada en aluminio de 4 mm de grosor con una elegante base de madera de nogal, aportando un estilo minimalista con un toque natural. Disponible en acabados negro y plateado, apunta a usuarios que buscan un equilibrio entre tamaño reducido, durabilidad y estética diferenciada.
Diseño de doble cámara para mejor refrigeración
La JONSBO T9 emplea una estructura de doble cámara: a la izquierda se sitúa la GPU, mientras que en el lado derecho quedan la placa base y la fuente de alimentación. Esta separación evita que los componentes que más calor generan compartan el mismo flujo de aire, optimizando la refrigeración.
El chasis incluye además ranuras de ventilación en la parte superior y en los paneles laterales, maximizando el flujo de aire dentro de sus compactas dimensiones. De manera adicional, admite la instalación de un ventilador de 120 mm en la parte superior, suficiente para un sistema ITX si se combina con el diseño abierto de la caja.
Flexibilidad para GPU y almacenamiento
La bandeja de la placa base es ajustable, permitiendo acomodar tarjetas gráficas en tres configuraciones: 2 slots, 2,5 slots y 3 slots. En el modo más amplio, admite GPUs de hasta 310 mm de longitud, lo que abre la puerta a gráficas de gama alta en un formato ultracompacto.
No obstante, si se instala un HDD de 3,5 pulgadas, la holgura para GPU se reduce a 202 mm. En cuanto a refrigeración del procesador, el soporte varía entre 58 y 78 mm de altura, lo que limita la elección a coolers de bajo perfil.
Para almacenamiento, ofrece espacio para una unidad de 2,5 pulgadas y una de 3,5 pulgadas, dentro de lo esperado en un chasis de estas dimensiones. La fuente de alimentación compatible es únicamente en formato SFX, reforzando su orientación a builds compactos.
Especificaciones físicas
La T9 mide 224 mm de alto, 155 mm de ancho y 325 mm de profundidad, con un peso de 3,85 kg. Su formato asegura un buen equilibrio entre portabilidad y compatibilidad de hardware, siendo ideal para usuarios que quieren un equipo pequeño, potente y fácil de transportar.
El uso de aluminio industrial junto al detalle en madera de nogal le otorga un carácter distintivo frente a otros chasis SFF, posicionándola como una opción atractiva para entusiastas que valoran tanto el rendimiento como el diseño.
Vía: Guru3D