El fabricante japonés de paneles OLED JOLED ha optado por tirar la toalla, ya que el consejo de administración de la compañía ha solicitado la declaración de bancarrota ante el Tribunal de Distrito de Tokio. JOLED tiene unos 33.700 millones de yenes (257 millones de dólares) en concepto de pasivos y espera recuperar parte de ellos vendiendo activos.
La Innovation Network Corporation de Japón (INCJ), que es el mayor accionista de JOLED, se hará cargo de su departamento de I+D, junto con un centenar de empleados, así como de su propiedad intelectual. Sin embargo, no se hará cargo de ninguna de las dos fábricas del fabricante, situadas en Nomi y Chiba (Japón).
Ambas fábricas emplean a unos 280 trabajadores y, en la actualidad, se prevé el cierre de las dos que producen paneles con la innovadora tecnología de impresión de JOLED para paneles OLED. Ahora bien, dado que JOLED sigue teniendo contratos de suministro con compañías de la talla de Apple, ASUS, Eizo, LG y Sony, INCJ continuará explotando las fábricas por el momento para cumplir los correspondientes contratos.
Al parecer, INCJ está asumiendo la responsabilidad de cubrir el pasivo de JOLED, amparando a los demás accionistas del fabricante, entre los que se encuentran la japonesa Denso y la china CSOT/TCL. JOLED ha experimentado dificultades durante la mayor parte de su andadura, ya que llegó tarde al mercado con sus paneles OLED y no pudo competir con firmas de la talla de LG y Samsung en Corea y BOE Display y CSOT en China.
Esperemos que INCJ pueda beneficiarse de la propiedad intelectual de JOLED, puesto que la compañía se está centrando en fabricar su propia línea de paneles OLED de cara al futuro.
Vía: TechPowerUp