Se dice que Apple está teniendo dificultades para atraer a desarrolladores a sus laboratorios de desarrollo Apple Vision Pro. Los laboratorios especiales centrados en Vision Pro se han creado en Cupertino, Londres, Múnich, Shanghái, Singapur y Tokio, con la expectativa de que los desarrolladores estuvieran interesados en aprender a desarrollar nuevas aplicaciones para la denominada plataforma de «computación espacial» de Apple. Sin embargo, según Mark Gurman, de Bloomberg, estas sesiones han estado hasta ahora «poco concurridas y con escaso número de desarrolladores».
Las gafas Apple Vision Pro fueron presentadas a bombo y platillo por Apple a principios del pasado mes de junio en su World Wide Developer Conference 2023, aunque no se pondrán a la venta hasta «principios de 2024«, según la propia compañía.
El plan de Apple había sido lanzar el producto ante su base de desarrolladores con la esperanza de que creara suficiente expectación, se subieran a bordo y empezaran a desarrollar aplicaciones a medida para la plataforma. Sin embargo, el «plan B» de Apple ha consistido en garantizar que su sistema operativo visionOS también sea compatible con las aplicaciones habituales del iPad, que no requieren mucha o ninguna optimización para ponerse en marcha.
La aparente falta de interés de los desarrolladores por Vision Pro no resulta del todo sorprendente. Aunque las gafas podrían ser la primera categoría de producto totalmente nueva para Apple en algunos años, se enfrentan a dos obstáculos fundamentales. En primer lugar, su precio asciende a la friolera de 3.499 dólares, 500 más de los ya elevados pronósticos previos al evento.
En segundo lugar, a pesar de los numerosos esfuerzos realizados en los últimos años, las gafas de realidad virtual o realidad aumentada aún no han logrado una aceptación generalizada entre los consumidores. Además, si el producto tiene éxito, la base instalada tardará en convertirse en un mercado en el que los desarrolladores quieran invertir.
Antes de su lanzamiento, existían dudas internas sobre la viabilidad de las gafas Apple Vision Pro. Johny Srouji, vicepresidente sénior de Apple Hardware Technologies, brilló por su ausencia en la presentación, a pesar de que esta incluía la presentación del último silicio de Apple.
Se dice que Srouji calificó las gafas de «proyecto científico« para distanciarse de ellas. Tony Fadell, conocido como el padre del iPod, acusó a Apple de haber «saltado el tiburón» con las gafas, una expresión que implicaba que la empresa parece haberse quedado sin nuevas ideas. El tiempo lo dirá, por supuesto, pero Apple espera que los desarrolladores creen algunas aplicaciones revolucionarias para las Vision Pro si quiere que despeguen. Los primeros indicios no son muy prometedores.
Vía: NotebookCheck