
AMD ha publicado un documento técnico sobre su nueva tecnología Dense Geometry Format (DGF), un sistema destinado a incrementar drásticamente el nivel de detalle geométrico en gráficos 3D. La propuesta se centra en reducir el peso de los datos de geometría, lo que permitiría superar las limitaciones de los métodos actuales como la teselación.
Bloques compactos de geometría
El funcionamiento de DGF se basa en empaquetar pequeñas piezas de malla —con hasta 64 vértices y 64 triángulos— en bloques compactos de 128 bytes. Estos contenedores incluyen posiciones de vértices y topología de iluminación, optimizando el almacenamiento y la transmisión de datos geométricos.
Este enfoque permite que escenas complejas con un alto nivel de detalle puedan representarse con un menor consumo de recursos, lo que se traduce en mayor eficiencia y escalabilidad en entornos 3D.
Comparación con Mega Geometry de NVIDIA
La idea guarda similitudes con la tecnología Mega Geometry de NVIDIA, introducida con la arquitectura Blackwell, aunque con diferencias en su implementación. NVIDIA orienta Mega Geometry principalmente a objetos renderizados con ray tracing a través de un modelo jerárquico de almacenamiento de geometría.
En cambio, AMD plantea DGF como una solución de aplicación más amplia, válida tanto para objetos rasterizados como para aquellos generados mediante trazado de rayos. Esto le da un mayor espectro de usos en motores gráficos que combinan técnicas híbridas.
Soporte de hardware y futuro arquitectónico
El documento aclara que ninguna de las arquitecturas actuales de AMD ofrece aceleración por hardware para DGF. Se trata de una tecnología que se integrará en futuras arquitecturas, como la rumoreada RDNA 5 o incluso la línea UDNA.
En GPUs sin soporte nativo, el stack de DGF puede ejecutarse mediante shaders, aunque con un pequeño coste de rendimiento. Pese a ello, AMD sostiene que sigue siendo más eficiente que renderizar directamente la geometría adicional con métodos tradicionales.
Implicaciones para el futuro de los gráficos
El Dense Geometry Format representa un paso hacia una gestión más inteligente y escalable de la geometría en gráficos 3D. Si su integración en futuras GPUs se concreta, podría mejorar significativamente la calidad visual en videojuegos, simulaciones y entornos profesionales, reduciendo al mismo tiempo el coste computacional.
La comparación con la propuesta de NVIDIA demuestra que la industria está avanzando hacia formatos optimizados de almacenamiento geométrico, clave para afrontar la próxima generación de gráficos hiperrealistas y entornos cada vez más complejos.
Vía: TechPowerUp