Con el auge del gaming en Europa, éstos no sólo mantienen ocupados a los jugadores, sino que también mantienen ocupados a los desarrolladores creando estos mundos desde sus casas. Sin embargo, la productividad está en juego cuando la pandemia ha obligado a desarrolladores e ingenieros a trabajar a distancia. Debido a las limitaciones del hardware informático utilizado en los hogares, los equipos suelen disponer de menos tiempo para crear y probar nuevas funciones. Con una tecnología más potente que pueda seguir su ritmo, los equipos pueden dedicar su tiempo y talento a un trabajo más creativo y de mayor valor.
AMD ha anunciado un nuevo case study con Epic Games, la empresa que está detrás de Fortnite, así como de Unreal Engine 4, que se utilizó en The Mandalorian, Star Wars: Rise of Skywalker, Game of Thrones de HBO y Westworld. Para mantenerse en la cima de la industria del diseño de juegos se necesita una combinación de talento creativo y la implementación estratégica de tecnología que ayude a los equipos a adoptar el trabajo remoto. Eso es exactamente lo que Epic ha conseguido con AMD.
Mejora de la productividad del trabajo remoto
Epic Games necesitaba que los ingenieros pudieran trabajar rápida y eficazmente desde casa durante la pandemia, y comenzó a desplegar estaciones de trabajo Threadripper y Threadripper PRO. Las nuevas CPU Threadripper tienen tantos núcleos y ofrecen tanta velocidad que los ingenieros y desarrolladores del equipo han podido trabajar en varios proyectos a la vez, a diferencia de lo que ocurría antes.
«Mientras que los usuarios en la oficina ahorraban entre 10 y 15 minutos», afirma Pat Swanson, ingeniero informático de Epic Games, «los usuarios en casa ahorraban horas. Después de eso, muchos usuarios estaban tan entusiasmados con los números que sus compañeros estaban obteniendo, que salieron a comprar sus propias CPU Threadripper para sus configuraciones en casa.»
El equipo de Epic informa de que el cambio a las CPU Threadripper ha generado una enorme expectación. «No hay nada más que pueda compararse con lo que hace la CPU Threadripper 3990X en cualquier rango de precios», dice Swanson. «Podría pedirle a otro fabricante que me envíe un chip de 20.000 dólares, y el Threadripper va a seguir igualándolo o superándolo. No es que el dinero sea una barrera en este caso, pero la relación precio-rendimiento es desigual. Es una obviedad».
Acelerar los flujos de trabajo
Epic Games necesitaba agilizar el proceso de compilación de código y conseguir tiempos de iteración y sombreado más rápidos. La capacidad de compilar y repetir rápidamente el código era fundamental para la calidad, pero el equipo no podía encontrar una solución que ofreciera alta velocidad de reloj y alto paralelismo simultáneamente.
La sustitución de las CPUs anteriores por AMD Ryzen Threadripper fue «un momento decisivo». En el caso de Unreal Engine, en una prueba interna de construcción de motores de ejecutables de software, las CPU de la competencia tardaron 46 minutos y 43 segundos, mientras que un Threadripper 3970X con 32 núcleos tardó apenas 15 minutos y 12 segundos, menos de un tercio del tiempo.
«Usando Threadripper, somos capaces de compilar el motor mucho más rápido de lo que podíamos hacer antes», dijo Nick Penwarden, vicepresidente de ingeniería de Epic Games. «Eso supone un enorme aumento de la eficiencia para todos los ingenieros del equipo. Cuanto menos tiempo pasen compilando código, más tiempo podrán dedicar al desarrollo de funciones, a probar la funcionalidad y a trabajar en la mejora de Unreal Engine.»
Puedes consultar el case study aquí.
