El pasado 2016, un número limitado de usuarios comenzó a reportar un serio problema de bootloop que no fue posible solucionar.
A medida que más usuarios comenzaron a reportar el problema, Google lo reconoció y dijo que un defecto de hardware causaba dicho error.
La buena noticia es que la compañía ahora está reemplazando los smartphones Nexus 6P que se brickean y reciben un nuevo Pixel XL en su lugar.
Y no solo eso, lo mejor es que Google esta reemplazando todos los Nexus 6P cuenten o no con garantía. Así que si tenéis dicho problema ya sabéis que hacer.