La saga Tomb Raider ha sido una de las grandes protagonistas de The Game Awards, donde se han anunciado dos nuevos títulos que marcarán una nueva etapa para Lara Croft. Por un lado, Tomb Raider: Catalyst, la esperada entrega principal que continuará la historia de la arqueóloga británica. Por otro, Tomb Raider: Legacy of Atlantis, una reinterpretación completa de su aventura original, pensada para acercar sus orígenes a una nueva generación de jugadores.
Ambos proyectos confirman la apuesta de la franquicia por Unreal Engine 5, un enfoque más ambicioso a nivel técnico y narrativo, y una planificación a medio plazo que sitúa sus lanzamientos entre 2026 y 2027 en PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC (Steam).
Tomb Raider: Catalyst, una nueva etapa para Lara Croft
Desarrollado por Crystal Dynamics, Tomb Raider: Catalyst supone un giro importante para la serie. La aventura se sitúa en el norte de la India, tras un cataclismo de origen mítico que ha despertado antiguos secretos y fuerzas que llevaban siglos ocultas. En este contexto, cazatesoros de todo el mundo convergen en la región, obligando a Lara a adelantarse a ellos para evitar que un poder ancestral caiga en malas manos.
La narrativa pone el foco en la confianza, la traición y las alianzas ambiguas, con una Lara Croft que deberá decidir cuidadosamente en quién confiar mientras el pasado y el presente chocan de forma constante. Según el estudio, se trata del mundo más grande creado hasta la fecha en Tomb Raider, con entornos repletos de secretos, tumbas complejas, puzles elaborados y un diseño pensado para explorar con mayor libertad.
Gracias a Unreal Engine 5, el juego promete un salto notable en fidelidad visual, iluminación y escala de escenarios, manteniendo al mismo tiempo el ADN clásico de exploración e ingenio que define a la saga. Tomb Raider: Catalyst llegará en 2027, dirigido tanto a veteranos como a nuevos jugadores.
Legacy of Atlantis, el regreso modernizado del origen de la saga
Junto a la nueva entrega principal, Crystal Dynamics ha sorprendido con Tomb Raider: Legacy of Atlantis, una reimaginación completa de la primera aventura de Lara Croft. Este proyecto se desarrolla en colaboración con Flying Wild Hog y busca recuperar el espíritu del título original, adaptándolo a los estándares actuales de jugabilidad y narrativa.
El juego propone redescubrir localizaciones exóticas, paisajes traicioneros, trampas mortales y enigmas clásicos, mientras Lara persigue las piezas del Scion, un artefacto de poder incalculable. Todo ello se apoya también en Unreal Engine 5, con mejoras claras en calidad gráfica, animaciones y diseño de niveles, además de introducir nuevas sorpresas pensadas para quienes ya conocen la historia.
Tomb Raider: Legacy of Atlantis tiene previsto su lanzamiento en 2026, posicionándose como una puerta de entrada ideal para nuevos jugadores y un homenaje directo a los orígenes de la franquicia.
Una Lara Croft renovada para una nueva era
Ambos títulos contarán con la interpretación de Alix Wilton Regan como Lara Croft, una actriz ya conocida en el sector por trabajos en Dragon Age: Inquisition, Cyberpunk 2077 o Mass Effect 3. Su regreso refuerza la continuidad del personaje y aporta una interpretación con mayor matiz emocional y profundidad, clave para esta nueva etapa.
Con dos lanzamientos de alto perfil, motores gráficos de última generación y una clara diferenciación entre futuro narrativo y reinterpretación del pasado, Tomb Raider se prepara para celebrar por todo lo alto sus 30 años de historia, dejando claro que Lara Croft sigue siendo uno de los iconos más sólidos del videojuego moderno.
Vía: TechPowerUp



















