Intel Nova Lake-S alcanzaría los 144 MB de caché bLLC y hasta 52 núcleos con arquitectura Coyote Cove y Arctic Wolf

Intel Nova Lake-S alcanzaría los 144 MB de caché bLLC y hasta 52 núcleos con arquitectura Coyote Cove y Arctic Wolf

Una nueva filtración de una fuente reconocida por su precisión ha revelado que los Intel Nova Lake-S podrían incorporar 144 MB de caché bLLC, un salto notable que busca ofrecer un equivalente directo al 3D V-Cache de AMD en rendimiento para juegos. Esta tecnología ya se aplica en los procesadores Clearwater Forest de servidores, donde la bLLC (base Last Level Cache) se integra bajo las losetas activas mediante un interposer pasivo, mejorando la latencia y el acceso a memoria. Su llegada al segmento de escritorio supondría un aumento considerable en el ancho de banda efectivo del procesador.

Un diseño de hasta 52 núcleos híbridos en configuración modular

Según el informe, el tope de gama de Nova Lake-S presentará una estructura con dos losetas de cómputo y una loseta SoC, alcanzando 52 núcleos en total. Cada loseta de cómputo alojará 8 P-Cores “Coyote Cove” y 16 E-Cores “Arctic Wolf”, mientras que la loseta SoC añadirá 4 LPE-Cores Arctic Wolf de bajo consumo. En conjunto, el diseño ofrecería una configuración 16 P-Core + 32 E-Core + 4 LPE-Core, aunque también se prevén versiones de una sola loseta con 28 núcleos.

Una de las incógnitas técnicas es si Intel implementará un bloque único de 144 MB de bLLC compartido entre ambas losetas de cómputo, o bien dos bloques de 72 MB independientes. En cualquier caso, el posicionamiento físico de la caché bajo el compute tile sugiere una mejora drástica en el acceso de datos para los núcleos de alto rendimiento, algo clave en cargas de trabajo gaming e IA local.

Soporte para AVX-512, AVX10.2 y NPU 6 con 74 TOPS INT8

La plataforma Nova Lake-S, que se comercializará como Intel Core Ultra 400 Series, también introducirá un salto de arquitectura IP significativo. Entre las novedades destacan la unidad NPU 6, capaz de alcanzar hasta 74 TOPS INT8, y el retorno del conjunto de instrucciones AVX-512, junto con su superset AVX10.2. Este movimiento desmiente los rumores que apuntaban a la desaparición de estas extensiones en futuras generaciones de procesadores x86, confirmando además compatibilidad con APX y AMX para cargas vectoriales y matriciales avanzadas.

En el apartado gráfico, los Nova Lake-S integrarán GPU Xe3P, sucesora directa de la arquitectura Xe2 presente en los chips Arrow Lake, con variantes adaptadas a cada segmento de producto. La combinación de caché masiva, soporte AVX10.2 y NPU de nueva generación posiciona a la familia como la apuesta más ambiciosa de Intel para competir con AMD Zen 6 y Ryzen AI MAX+.

Una respuesta directa al dominio de AMD en juegos

El salto a 144 MB de bLLC marca un cambio de enfoque en la estrategia de Intel: reforzar el rendimiento gaming mediante una solución física de caché similar a la de los Ryzen X3D, pero integrada en el propio tile del procesador. Este planteamiento permitirá mayor densidad de datos locales y menor latencia, claves para títulos dependientes de la memoria L3.

Si los resultados internos coinciden con las expectativas, Nova Lake-S podría cerrar la brecha frente a AMD Zen 6 3D y establecer una nueva base tecnológica para la próxima década de procesadores híbridos de escritorio. Su lanzamiento está previsto para 2026, consolidando a Intel como protagonista en el sector de CPU de alto rendimiento gracias a un enfoque que combina eficiencia energética, potencia multihilo e integración de IA.

Vía: TechPowerUp

Sobre el autor