Intel ha comenzado a aparecer en bases de datos públicas con los primeros resultados del Core Ultra X7 358H, perteneciente a la futura generación Panther Lake. Este procesador busca mejorar la eficiencia y elevar el rendimiento gráfico integrado, pero las cifras iniciales de CPU todavía no indican un salto claro frente a la familia Arrow Lake-H. Como suele ocurrir con muestras tempranas, el margen para ajustes de firmware y comportamiento de frecuencias sigue siendo considerable.
Los datos provienen de una entrada temprana en PassMark, donde el chip figura como una configuración de 16 núcleos en disposición 4+8+4 junto con 18 MB de caché L3, una combinación que coincide con especificaciones preliminares filtradas. Esta estructura mezcla núcleos de rendimiento, eficiencia y bajo consumo pensados para equilibrar batería y respuesta en portátiles delgados.
Resultados iniciales: CPU por detrás de Arrow Lake-H
El Core Ultra X7 358H obtuvo 4.282 puntos en la prueba de un solo núcleo, situándose por debajo de modelos como los Intel Ultra 7 255H y Ultra 7 265H, que mantienen posiciones superiores en la misma base de datos. En carga multinúcleo, el procesador alcanzó 29.426 puntos, una cifra que queda ligeramente por detrás del 255H y claramente por debajo del 265H, lo que refleja un estado temprano del silicio o una configuración conservadora del turbo y los límites de energía.
Arquitectura y diseño: 4+8+4 con 18 MB L3 para portátiles de bajo consumo
La disposición 4+8+4 combina núcleos de distinto comportamiento para ajustar mejor las cargas mixtas de productividad, navegación, tareas de IA ligera y uso general. Los 18 MB L3 se mantienen en línea con filtraciones anteriores y refuerzan el enfoque en eficiencia y respuesta más que en rendimiento bruto. Esta filosofía apunta a portátiles finos donde la estabilidad térmica y el consumo son factores decisivos.
GPU integrada Arc B390: salto gráfico notable con Xe3
En la parte gráfica, la Arc B390 basada en la arquitectura Xe3 obtuvo 9.339 puntos en PassMark, un valor similar al de una GTX 1650 Super, aunque la referencia procede de un entorno de escritorio. Frente a GPUs de portátil, la B390 queda aproximadamente un 20–25% por debajo de una RTX 3050, pero supera con claridad el rendimiento típico de iGPU previas. Otras pruebas como Geekbench han mostrado resultados algo mayores, reflejando las variaciones habituales en drivers tempranos.
Conclusiones preliminares: potencial en la iGPU, margen pendiente en CPU
Estos resultados corresponden a una muestra de ingeniería, por lo que no representan el rendimiento final. Es habitual que los primeros chips trabajen con microcódigo incompleto, curvas de voltaje cautas y boosts limitados. La Arc B390 apunta a un avance real en GPU integrada, mientras que la CPU todavía necesita ajustes para situarse por encima de Arrow Lake-H. A medida que se acerque el lanzamiento, pruebas más completas permitirán distinguir qué parte del déficit actual se debe al estado temprano del hardware y cuál al propio diseño.
Vía: Guru3D






















