La firma estadounidense Visual Instruments ha sorprendido al mercado al presentar el Phantom, un monitor transparente de 24 pulgadas que abandona los métodos tradicionales de visualización para apostar por una innovadora técnica de proyección óptica sobre vidrio. Su objetivo: ofrecer una experiencia más inmersiva y visualmente impactante, en la que las imágenes parecen flotar frente al usuario.
Una nueva forma de ver a través de la pantalla
A diferencia de otros conceptos de OLED o LCD semitransparentes, el Phantom no depende de píxeles parcialmente opacos. En su lugar, el sistema integra un módulo de proyección situado en la base, que emite las imágenes hacia un panel de vidrio tratado con un revestimiento especial. Este cristal está inclinando en ángulo respecto al usuario, de modo que refleja el contenido proyectado mientras sigue siendo transparente.
El resultado es una ilusión visual en la que los gráficos parecen suspendidos en el aire, similar a la tecnología de los head-up displays (HUD) presentes en algunos vehículos modernos. El usuario percibe la imagen flotando sobre su entorno sin perder la visibilidad del espacio detrás de la pantalla.
Transparencia regulable y alto rango dinámico
Uno de los aspectos más impresionantes del Visual Instruments Phantom es su capacidad para alcanzar 5.000 nits de brillo en modo HDR, una cifra notable incluso frente a monitores profesionales. Además, ofrece resolución 4K y cobertura del 100 % del espacio sRGB, lo que garantiza una reproducción precisa del color y una visibilidad óptima incluso en entornos muy iluminados.
La transparencia puede ajustarse dinámicamente, permitiendo reducirla a cero para convertir el Phantom en un monitor convencional cuando sea necesario. En cuanto a conectividad, incorpora puertos USB-C y HDMI, lo que facilita su integración en entornos de trabajo o estaciones de diseño avanzadas.
Producción limitada y precio premium
Visual Instruments planea producir inicialmente solo 10 unidades bajo la serie Founders Edition, con envíos previstos antes de que finalice 2025. El precio será similar al del Apple Studio Display, alrededor de 1.599 dólares (unos 1.383€). La compañía pretende perfeccionar el diseño a partir de los comentarios de los primeros usuarios, evaluando la viabilidad de una producción más amplia.
Por ahora, el Phantom representa una apuesta ambiciosa que mezcla innovación visual y ergonomía: la marca asegura que su sistema puede reducir la fatiga ocular al permitir enfocar a distintas distancias sin cambiar la posición de la cabeza. Falta por ver si este concepto encontrará su público o quedará como una curiosidad tecnológica más en la evolución de los monitores del futuro.
Vía: NotebookCheck




















