El nuevo modo ahorro de energía de la PlayStation 5 está dando mucho que hablar entre la comunidad. Aunque no resulta especialmente llamativo en las consolas actuales, este ajuste podría convertirse en una función clave en la futura PS6 portátil, cuyo desarrollo ha sido mencionado en recientes filtraciones.
El equipo de Digital Foundry ha analizado a fondo este modo en dos juegos compatibles: Demon’s Souls y Days Gone Remastered. Los resultados muestran cómo los desarrolladores están aplicando diferentes estrategias para reducir el consumo energético sin sacrificar en exceso la calidad visual.
Demon’s Souls reduce resolución y tasa de cuadros
En Demon’s Souls, la eficiencia energética se logra mediante ajustes simples en resolución y rendimiento. El título ofrece habitualmente un modo cinemático 4K/30 FPS y otro 1440p/60 FPS. Sin embargo, con el modo ahorro activo, el sistema fuerza un único ajuste de 1440p/30 FPS, incluso en la PS5 Pro.
Según los datos de Digital Foundry, el consumo energético se redujo aproximadamente a la mitad, pasando de unos 200W a 100W en la PS5 estándar, con un resultado ligeramente más eficiente en la Pro. A nivel visual, se aprecian caídas puntuales de rendimiento, pero la calidad general se mantiene estable y fluida.
Days Gone Remastered adopta otra estrategia
Por su parte, Days Gone Remastered muestra un enfoque distinto. El jugador puede seguir eligiendo entre modo rendimiento (1440p/60 FPS) y modo calidad (4K/30 FPS), aunque las pruebas revelan que las resoluciones reales son más bajas y se utiliza renderizado por tablero (checkerboard) para ahorrar recursos.
Con muchos elementos en pantalla, los fotogramas pueden caer hasta 45 FPS en modo rendimiento, generando cierta pixelación en el entorno. En términos de energía, el consumo baja de 235W a 115W, una reducción similar al 50% observada en Demon’s Souls.
Un adelanto de la PS6 portátil
Estos resultados coinciden con las especificaciones filtradas de la futura PS6 portátil, conocida internamente como Canis. Según Moore’s Law is Dead, el dispositivo limitaría la CPU a 8 hilos y reduciría la frecuencia de la memoria GDDR6 en un 50 % para mantener el consumo bajo control.
Aun así, se espera que el modelo portátil cuente con una resolución inferior a 1440p en modo no acoplado, junto con nuevas técnicas de reescalado y características RDNA 5 que mejorarían el rendimiento sin comprometer demasiado la calidad gráfica.
Aunque los resultados actuales no son perfectos, demuestran que Sony está avanzando hacia una gestión energética mucho más eficiente, un paso fundamental para garantizar autonomía y estabilidad térmica en la PS6 portátil.
Vía: NotebookCheck


















