
AMD ha presentado su nueva serie Ryzen Embedded 9000, una línea de procesadores diseñada específicamente para computación industrial, automatización y aplicaciones de visión artificial. Estos chips destacan por su eficiencia energética, baja latencia y alta fiabilidad a largo plazo, características esenciales para entornos donde el rendimiento y la estabilidad son críticos.
Arquitectura Zen 5 con enfoque industrial
Basada en la arquitectura AMD Zen 5 y fabricada en proceso de 4 nanómetros, la serie Ryzen Embedded 9000 ofrece hasta 16 núcleos de alto rendimiento y un consumo configurable entre 65 y 170 vatios, lo que permite adaptar cada sistema a sus necesidades específicas. Gracias a la compatibilidad con instrucciones AVX-512, memoria DDR5, PCIe Gen 5 y hasta 128 MB de caché 3D V-Cache, estos procesadores garantizan un rendimiento superior en tareas de IA, control industrial, robótica y análisis en tiempo real.
Para los sistemas que requieren representación visual, los nuevos Ryzen Embedded integran gráficos AMD RDNA 2, lo que elimina la necesidad de una GPU dedicada y reduce tanto el coste como la complejidad del sistema.
Fiabilidad y soporte prolongado
Una de las principales ventajas de la serie Ryzen Embedded 9000 es su durabilidad. AMD garantiza hasta siete años de disponibilidad y soporte, con las variantes Ryzen PRO Embedded extendiendo ese ciclo hasta diez años. Además, incorporan las tecnologías AMD PRO, que proporcionan seguridad multinivel y gestión remota, incluyendo funciones como Platform Secure Boot y Memory Guard con cifrado completo de memoria para proteger los datos frente a amenazas modernas.
El uso del Socket AM5 asegura compatibilidad hacia atrás y hacia adelante, lo que simplifica las actualizaciones y la integración en sistemas ya existentes. Estas cualidades convierten a la plataforma en una solución ideal para entornos industriales, médicos y de automatización que requieren continuidad operativa a largo plazo.
Preparada para el futuro
Los Ryzen Embedded 9000 ofrecen amplias opciones de conectividad, incluyendo Wi-Fi 6E, PCIe Gen 5 y I/O de alta velocidad, permitiendo construir sistemas escalables y preparados para tecnologías futuras. AMD busca así dar a los integradores una plataforma flexible, capaz de adaptarse tanto a las demandas actuales como a las del futuro.
En conjunto, la serie AMD Ryzen Embedded 9000 combina rendimiento, eficiencia y fiabilidad, ofreciendo una base sólida para los diseñadores de sistemas industriales y embebidos. Con esta nueva generación, AMD consolida su presencia en el sector de la computación industrial y refuerza su compromiso con soluciones duraderas, seguras y preparadas para la próxima era de la automatización inteligente.
Vía: TechPowerUp