
La compañía Retro Games ha anunciado el lanzamiento de theC64 mini – Black Edition para el próximo 24 de octubre de 2025, con reservas abiertas desde el 31 de julio a un precio de 104,53 dólares. Esta nueva versión del clásico miniordenador Commodore 64 adopta un diseño completamente negro, con acabado mate y brillante, manteniendo las proporciones a media escala del original.
Diseño, hardware y conectividad mejorada
Este modelo mantiene la distribución del teclado original (aunque no funcional) y se acompaña de un joystick USB con microswitches, diseñado para ofrecer una experiencia similar a los mandos arcade clásicos, tanto en tacto como en respuesta.
Internamente, el sistema reproduce la arquitectura del Commodore 64 original, pero incluye ajustes modernos para hacerlo compatible con televisores actuales. La salida de vídeo es HDMI a 720p, y se puede seleccionar entre modo 50 Hz o 60 Hz, según la región. Además, cuenta con varios puertos USB-A que permiten conectar memorias USB, teclados de tamaño completo, otros gamepads o joysticks alternativos.
Cada uno de los 25 juegos preinstalados admite cuatro ranuras de guardado por título, lo que permite pausar y retomar partidas fácilmente, algo impensable en la máquina original.
Catálogo de juegos y firmware optimizado
En lugar de centrarse únicamente en la nostalgia, esta edición da protagonismo a la escena Neo-Classic, con juegos desarrollados por fans del sistema. Entre los títulos más destacados se incluyen:
- Sam’s Journey, con un 98% de puntuación “Sizzler” en Zzap!64
- A Pig Quest, con un 96% y medalla de oro
- Hessian, un shooter con ambientación cyberpunk
- Y otros títulos de plataformas, puzles y acción
La iniciativa se enmarca en la campaña Back In Black, que busca resaltar la creatividad actual dentro del ecosistema C64, todavía activo tras más de cuatro décadas.
A nivel técnico, la consola utiliza un firmware que intercepta los caminos de código del C64 y los canaliza a través de un escalador de vídeo por FPGA, asegurando una salida de calidad adaptada a televisores modernos. El joystick, aunque con conector USB estándar, mantiene los microswitches tipo arcade, lo que le da ese “clic” clásico tan característico.
Además, es posible cargar imágenes de disco o programas personalizados desde unidades USB externas, ampliando las posibilidades del sistema mucho más allá de los juegos preinstalados.
Para coleccionistas y curiosos del 8-bit
TheC64 mini – Black Edition apunta tanto a coleccionistas como a nuevos usuarios que quieren explorar la informática de 8 bits sin tener que lidiar con hardware envejecido. Con mejoras en salida de vídeo, controles y biblioteca de juegos, es una de las formas más fieles y accesibles de revivir el Commodore 64 en 2025.
Vía: Guru3D