TechEpiphany ha compartido un extracto de los datos de ventas de placas base AMD e Intel de MindFactory, y ha comparado las recientes estadísticas con algunas tomadas a finales de 2020. Hay dos puntos a tener en cuenta: Intel tiene una cuota mucho mayor en estos momentos y existe una enorme diferencia entre el precio medio de venta (ASP) de noviembre de 2020 y el de marzo de 2023.
El primer punto puede explicarse de forma simple, ya que la cuota de ventas de placas base de AMD e Intel obviamente fluctuará en función de los nuevos lanzamientos de CPU. En noviembre de 2020, los Ryzen 5000 eran la compra obligada, mientras que Intel parece más saludable actualmente gracias a una combinación de Raptor Lake compatible con LGA 1700 y a que los usuarios de PC se resisten a adquirir tanto un nuevo chip Ryzen 7000 como una placa compatible con el socket AM5.
Lo que podría resultar más interesante para la mayoría, especialmente en el actual clima de crisis financiera, es el sorprendente incremento del ASP de las placas base tanto de Intel como de AMD. A finales de 2020, los consumidores pagaban una media de 140,78€ por una placa de un fabricante compatible con un chip Intel y de 120,50€ por una placa base con el socket apropiado para un procesador AMD. En marzo de 2023, esos ASP subieron a la friolera de 197€ para las placas del equipo azul y a 163€ para las placas del equipo rojo.
Este espectacular incremento resulta más evidente si se analiza en forma de porcentajes: +35% para AMD y básicamente +40% para Intel (39,93%). Merece la pena señalar aquí que son socios como MSI, Gigabyte y ASRock los que fijan los precios de sus productos, si bien, evidentemente, tampoco ayuda que las compañías de semiconductores introduzcan un nuevo socket de CPU.
Es posible poner dichos incrementos porcentuales en perspectiva, comparándolos con las tasas de inflación en Estados Unidos y Europa, y se avecina una tremenda bofetada para los aficionados al DIY que pretendan montar su propio equipo con componentes específicos, pero que no puedan permitirse el lujo de adquirirlos en su totalidad. La inflación media en Europa ha sido del 1,95% anual (1997-2023), pero en 2022 alcanzó el 9,9%. En Estados Unidos, la inflación ha oscilado entre el 0% y el 3,1% en la última década, y ha alcanzado el 8% en 2022.
Si los precios de las placas base hubieran reflejado esa misma inflación, las tasas históricas y actuales (compuestas de 2021 a 2023) tanto en Europa como en Estados Unidos situarían el ASP de las placas en torno a 145-147€ (157-159 dólares) para las unidades basadas en AMD y 169-172€ (183-187 dólares) para las compatibles con Intel.
En otras palabras, los precios ASP globales de las placas base han superado incluso las crecientes tasas de inflación en un 10-16% compuesto durante el periodo de tiempo pertinente, lo que podría ayudar a explicar la caída de ventas notificada y poner de manifiesto la consiguiente necesidad de opciones más económicas.
Vía: NotebookCheck