La cotidiana vida escolar ha cambiado significativamente en los últimos meses. La digitalización de la educación ha sido (literalmente) una experiencia de aprendizaje para todos los involucrados, y ahora el objetivo debe ser utilizar esa experiencia y construir sobre ella. A fin de cuentas, contar con el equipo adecuado contribuye a aprender mucho más, incluso desde casa.
Educación desde casa con futuro
La tendencia hacia la educación desde casa, que ha surgido principalmente durante el último año, ha tenido muchas consecuencias y seguirá desarrollándose en el futuro próximo. Algunos colegios están alternando entre el aprendizaje presencial y el virtual, mientras que otros se limitan e utilizar el aprendizaje virtual para ayudar a los alumnos con los deberes escolares. En ambos casos, los equipos de aprendizaje sofisticados en el hogar son una ayuda valiosa para los alumnos, tanto para llevar a cabo sus investigaciones como para comunicarse con otros alumnos. Además, los estudiantes necesitan practicar regularmente (de forma supervisada) con sistemas informáticos, y tienen que aprender los conceptos básicos de Internet. Estos son elementos fundamentales para educarse en el aspecto multimedia, que es más importante que nunca. Pero, ¿cómo funciona un espacio de aprendizaje digital cuando se tiene el equipo adecuado? Hemos resumido los consejos más importantes, y tenemos una serie de sugerencias para seleccionar el hardware adecuado.
¿Ordenador de sobremesa, portátil o tablet?
La decisión más básica, por supuesto, consiste en valorar si se debe proporcionar a los niños un ordenador de sobremesa convencional, un portátil o una tablet. En la mayoría de los casos es aconsejable comprar un portátil o tablet, que ofrecen una flexibilidad considerablemente mayor que un ordenador de escritorio. Se pueden usar tanto en casa como en la escuela, en viajes de clase o incluso en un intercambio internacional de estudiantes.
Cuando se usa con una pantalla de calidad, cualquier tipo de dispositivo es también comparable en ergonomía con un ordenador de sobremesa, lo que a menudo hace que sea innecesario comprar hardware adicional. Los dispositivos actuales vienen con un micrófono y una cámara web ya integrados, por lo que no tienen que comprarse por separado para permitir la participación en clases online.
Sin embargo, la decisión final sobre el hardware y el sistema operativo siempre debe hacerse en consulta con el personal docente, que sabe exactamente qué programas y aplicaciones se utilizarán realmente para las lecciones.
Portátil: ¿modelo para principiante o hardware profesional?
Especialmente para los niños pequeños, es recomendable comprar dispositivos que tengan un diseño muy duradero y que, si es posible, no se rompan al caerse. Los niños podrán disfrutarlos durante más tiempo en comparación con los frágiles y llamativos ultrabooks, y además serán más asequibles para los padres.
Por supuesto, el equipo técnico específico depende en gran medida de tus necesidades individuales y de tu presupuesto. Los siguientes puntos de referencia te ayudarán a seleccionar el dispositivo adecuado:
- Un procesador de alto rendimiento
- Memoria RAM de al menos 6 GB; preferiblemente 8 GB
- Un disco duro SSD con espacio de almacenamiento de al menos 128 GB
- Una pantalla con resolución Full HD como mínimo
- Una cámara web y altavoces integrados, así como un micrófono para videoconferencias
- Una duración de batería de al menos 6 horas
A medida que tus hijos crezcan, es posible que desees optar por un hardware más potente para ellos. De esta manera, ya estarán preparados con un portátil competente cuando entren en la universidad. Para los escolares, recomendamos un ordenador portátil de 13 o 15 pulgadas que cumpla con los criterios mencionados anteriormente. Un niño podrá arreglárselas con ese tipo de dispositivo durante unos cuantos años.
Tablet: el miniordenador moderno
Una tablet puede ser una buena alternativa a un ordenador portátil, especialmente en casos en los que hay que reducir costes y ya se dispone de una tablet que puede usarse en el colegio. Sin embargo, dependiendo del modelo, puede ser más difícil o más costoso encontrar el software adecuado. Por ello, deberías consultar a los profesores de tu hijo y asegurarte de que los programas o aplicaciones requeridos estén disponibles para el dispositivo que has elegido, y estudiar detalladamente la tienda digital que vas a poder usar.
Como regla general, la tablet que utilice tu hijo no debe tener más de dos años de antigüedad para proporcionar suficiente capacidad de rendimiento y fiabilidad futura. En general, estos dispositivos no pueden ser renovados. Como mínimo, debería contar con un procesador de dos núcleos y 2 GB de RAM.
La pantalla correcta para una visualización plena
Con el hardware adecuado, tanto las tablets como los portátiles pueden ser considerablemente más eficientes y ergonómicos para usar en casa. La compra más importante es un monitor externo, que permite una mejor postura al sentarse y tiene una resolución más alta, lo que hace que tu trabajo sea más fácil de ver y cause menos tensión en tus ojos.
Los criterios más importantes para un monitor incluyen un panel de última generación con la reproducción de color más uniforme posible y opciones adecuadas para ajustar la posición. Un buen monitor debería permitirte ajustar su altura, inclinación y rotación. Los paneles de última generación con tecnología IPS evitan la fatiga ocular y, por ejemplo, permiten ajustar la cantidad de luz azul.
Sin embargo, la elección del tamaño y la resolución de la pantalla depende en gran medida de las aplicaciones que se vayan a usar y del espacio disponible. Sin embargo, como regla básica recomendamos un monitor con una diagonal de pantalla de al menos 23 pulgadas y resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles).
Otros accesorios
Obviamente, un teclado y un ratón son necesarios al utilizar un ordenador de sobremesa, pero también deberías tenerlos disponibles al usar un ordenador portátil o una tablet en casa. Trabajar con estos dispositivos de entrada es simplemente mucho más conveniente, y además los niños van a tener que acostumbrarse a ellos de todos modos. Incluso el trackpad más avanzado y el teclado integrado más moderno están diseñados principalmente para uso portátil, y no para un uso prolongado sobre un escritorio. Te sentirás mucho más cómodo con teclado y ratón tradicionales, incluso en modelos baratos.
Por un poco más de dinero también puedes conseguir unos auriculares adecuados tipo headset. Esto es tan importante para el equipo básico de un aula digital de última generación como la cámara web, pero además cumple dos funciones a la vez. En primer lugar, sirve como una alternativa al micrófono incorporado durante las videollamadas. Y en segundo lugar, proporciona un blindaje acústico adecuado que ayuda a mejorar la concentración.
Una impresora también debería formar parte de la lista de la compra, y a ser posible debería incluir una función de escáner para que, por ejemplo, se puedan digitalizar las hojas de trabajo. Es especialmente práctico: la mayoría de las impresoras modernas funcionan a través de Wi-Fi y ya no crean ningún desorden de cables.
Internet potente
No importa dónde ni cómo se configure el espacio de estudio en casa, requerirá una buena conexión online. Esto es tan esencial para la investigación como lo es para la instrucción en el aula en vivo a través de videoconferencias. El problema es que muchos hogares privados tienen una cobertura WiFi irregular y no hay tomas de red instaladas. Las soluciones de red modernas ayudan a resolver estos problemas: por ejemplo, los pioneros alemanes de la tecnología Powerline de devolo utilizan el cableado eléctrico de la casa para transmitir las conexiones a Internet en toda la casa. Lo único necesario es conectar unos pequeños adaptadores que convierten cualquier toma de corriente en un punto de acceso a Internet de alta velocidad, ya sea con o sin cables. Las funciones Mesh de última generación aseguran la máxima comodidad y garantizan una recepción estable en toda la casa.
Con dispositivos como los de la serie Magic, el lugar destinado a la educación en el hogar, así como el resto de la casa, se puede tener una conexión a Internet a tu gusto. Además de las altas velocidades, las ventajas de una solución como esta también incluyen el control parental integrado, que se puede usar para predefinir exactamente cuándo y cómo tus hijos pueden usar Internet.